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El apoyo de los judíos de Nueva York al presidente de Estados Unidos, Barak Obama, ha bajado severamente el mes pasado y ahora solo puede contar con una pequeña mayoría para las elecciones. Las encuestas indican que la razón es que los judíos – como otros – se sienten peor que hace cuatro años.
Se espera que el presidente gane fácilmente en esta ciudad en los comicios de noviembre. “Nueva York no está mostrando ninguna indicación de moverse de su sólido status azul en las elecciones presidenciales en las últimas dos décadas y medias”, destacó el vocero de la investigación Siena, Steven Greenberg.
Sin embargo, la baja en el apoyo judío es un signo preocupante para sus financistas y para los administradores de la campaña en los estados en los que el voto judío podría ser crítico.
Si se llevan a cabo elecciones hoy, solo el 48% de los judíos de Nueva York dijo que el presidente Obama debería ser reelecto, mientras que el 46% dijo que el próximo líderdebería ser Mitt Romney, el candidato republicano que será nominado oficialmente el mes que viene en una convención del partido. Todo el estado beneficiaría a Obama sobre su competencia por un margen de 54-42 puntos si se vota hoy.
Los resultados fueron levemente diferentes cuando se les preguntó a los votantes si elegirían a Obama o Romney hoy en día, con el presidente recibiendo un 51% del voto judío mientras que el 43% fue a Romney. A nivel estatal Obama tiene una ventaja de 59-35 puntos.
En respuesta a una pregunta de si las personas individuales se sentían mejor o peor hoy que hace cuatro años, solo el 25% respondió de modo positivo y un 32% de modo negativo. El quiebre entre los votantes judíos fue más negativo: solo el 13% se siente mejor y un 41% peor.
De manera similar, solo el 30% de quienes respondieron y el 27% de los votantes judíos vieron a Estados Unidos en una mejor posición que cuatro años atrás. Sin embargo, fueron optimistas sobre los prospectos en l futuro, con un 50 y un 52% diciendo que el país estará en una mejor posición y solo un 15 y 11% prediciendo que estará en una peor posición.