Lo peor no es la maldad de los malos, sino el silencio de los buenos.
Siempre digo que ser dirigente de la comunidad judía no se compara con dirigir ningún otro grupo de pertenencia. Fuertes presiones e hipótesis de conflicto apocalípticas en manos de dirigentes vocacionales que nadamos entre tiburones profesionales.
No es momento para tibios. No es momento de divisiones. Es hora de cerrar filas.
La posición que fijo ahora no me la enseñaron en ninguna facultad de Ciencias Políticas y no me la sugirió ningún asesor político. La aprendí en mi casa, en el barrio y en el vestuario. Se llama “no hacerme el distraído”.
No sé y no es mi función investigar lo que hizo mi hermano de gestión Aldo Donzis hace 30 años ni mi hermano Sergio Bergman como Rab de un Beit Din constituido de común acuerdo entre partes. No soy juez para juzgarlos. Para mí somos todos inocentes hasta que alguien demuestre ante la ley lo contrario.
Lo que hacen aquellos medios que le dan una cobertura central a un conflicto entre partes destacando en letras de molde y negrita el nombre de nuestra DAIA, su Presidente y un Rabino en ejercicio de sus funciones rabínicas es definitivamente inmoral. Es una operación de prensa e intenta dañar a la comunidad toda. Y es caldo de cultivo para el antisemita latente de turno.
Leer que la comunidad como tal “cajoneó” esta historia es una maldad tendenciosa y totalmente inexacta. Quien conoce un poquito de nuestra comunidad sabe que es imposible que articulemos tantas coincidencias operando con semejante espíritu de cuerpo.
Hace ya casi tres décadas, en nuestra Argentina recuperamos la democracia y vivimos en un Estado de Derecho en el cual nuestras instituciones democráticas están en pleno funcionamiento.
Quien tenga que denunciar a alguien, que lo haga en la Justicia. Repito: todos somos inocentes hasta que se demuestre lo contrario ante la ley.
Algunos me susurran que lo mejor es callarse y esperar en silencio que pase el chubasco.
Por favor, cuando vengan por mí, no se callen.
Yo cierro filas hoy por mis hermanos Aldo y Sergio, mañana por vos, pasado por mí y todos los días por mi comunidad.
CGG
* Presidente de la Federación Argentina de Centros Comunitarios Macabeos (FACCMA), una de las instituciones centrales de la comunidad judeoargentina, que agrupa a todas las entidades sociodeportivas judías del país. Su nombre suena como uno de los candidatos a la presidencia de la DAIA en los comicios que se realizarán en noviembre.