«El 11 de septiembre permitió que se ligaran los puntos de vista americanos y los intereses de Israel», declaró en Herzliya, cerca de Tel Aviv, en una rueda de prensa dedicada a «las tendencias del terrorismo tras el 11 de septiembre».
«Los americanos han integrado, progresivamente, la cuestión palestina en la guerra internacional contra el terrorismo», prosiguió, y explicó que esta posición es resultado de la doctrina que establece que no hay «terrorismo bueno» y «terrorismo malo».
«Antes del 11 de septiembre, los norteamericanos habúian adoptado una posición equilibrada que responsabilizaba de la crisis a las dos partes; tras los atentados, la responsabilidad ha sido imputada, poco a poco, a los palestinos», explicó satisfecho.
La doctrina estadounidense que preconiza acciones preventivas ha tenido consecuencias positivas para Israel, añadió. «La idea de que es necesario lanzar ofensivas contra los territorios enemigos y que no hay que contentarse con defenderse se entiende mejor hoy en día», estimó, y comparó, en ese sentido, las operaciones militares estadounidenses en Afganistán con las israelíes en los territorios palestinos.
Fte E.Press