Itongadol.- 14 de marzo 2013, 3 de Nissan 5773
A su excelencia Reverendísima, su Santidad, Papa Francisco I:
Permítanos expresarle nuestras más cálidas y cordiales felicitaciones por su nombramiento como sumo Pontífice. Su humildad, modestia, sencillez y sensibilidad humana que honran al ser humano son los atributos que reflejan su personalidad, aun de haber llegado a la cúspide de ocupar honrosamente el más alto Ministerio de la Fe Católica como primado de la República Argentina.
El Mundo y la Argentina en particular se enorgullecen de sentir la alegría y satisfacción de que una personalidad con sus cualidades humanas habrá de ser luz que nos da esperanza para que haya un mundo mejor, respeto e igualdad y los derechos de cada uno sean respetados con armonía y hermandad. Qué la paz, la justicia y la verdad sean a través de su reinado, con la predica y la conducción, los pilares que sostengan al mundo. Qué el Eterno lo inspire y acompañe para defender la justicia, proclamar los valores de esa ponderable virtud, sembrar semillas prodigiosas de la moral que eleva de la gracia que reconforta y del saber que ilumina y conduce a la cumbre de la nobleza y al camino de la felicidad.
Qué sus sagradas palabras sean antorchas que ilumine el camino del bien y del saber y de ellas surjan fulgurantes las más nobles virtudes tales como la verdad, la justicia, la libertad, la bondad y la honradez; para que sean sin cesar el guía constante de todos los seres humanos. Qué su reinado se vea coronado de éxitos con la ayuda de Dios, Amén.
Rabino Shlomo Ben Hamu, Gran Rabino de la República Argentina.