«No se puede apuntalar a Abu Mazen (el presidente de la ANP, Mahmud Abás) con fuerzas palestinas únicamente, es necesaria la participación de Egipto y Jordania», dijo Netanyahu en declaraciones a la prensa local.
El ex primer ministro, que se encuentra en Washington desde donde hizo declaraciones a periodistas israelíes, propone el despliegue de la «Brigada Bader», formada por soldados palestinos e integrada en el Ejército jordano, pero que recibe ordenes de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), presidida por Mahmud Abás.
La participación de esa brigada fue propuesta hace varios meses por los propios palestinos como contrapeso al creciente poder de los islamistas en Gaza, que ahora controlan, y el paso de esos efectivos por el territorio israelí fue aprobado por el primer ministro Ehud Olmert.
En ese sentido, y para impedir un fenómeno similar en Cisjordania, Netanyahu sostiene que el futuro de Abás no depende de dinero y armas, «porque ya las tuvo antes y no pudo evitar el golpe de Hamás», sino de una estrecha cooperación con Egipto y Jordania.
«Egipto debe impedir el contrabando de armas a Gaza, cosa que no ha hecho hasta ahora; Jordania debe ayudar con el despliegue limitado de fuerzas en Judea y Samaria (Cisjordania)», explica.
Y agrega: «La Brigada Bader puede imponer el orden y la ley».
Hasta ahora Israel se había opuesto a cualquier presencia de fuerzas árabes en Cisjordania y Gaza, pero en los últimos meses Olmert se muestra cada vez más convencido de las ventajas.
Olmert propuso la semana pasada desplegar una fuerza árabe en Gaza, propuesta que fue rechazada por Egipto.