El primer ministro israelí, Ehud Olmert, testificó hoy durante siete horas ante el Comité Winograd, órgano encargado de investigar la participación de las tropas y el Gobierno israelí en la segunda guerra del Líbano que se libró el pasado verano con objeto de debilitar a la milicia chií libanesa Hezbolá, según informó el diario hebreo ‘Haaretz’.
Según varias fuentes, el primer ministro declaró ante el comité que Israel salió victorioso de la contienda.
Olmert es el último testigo en comparecer ante la comisión, que está elaborando un informe de conclusiones, cuya publicación no se espera hasta mediados de marzo.
Se esperaba que el Comité preguntara al mandatario sobre las decisiones que tomó durante el conflicto, la información que recibió del Ejército antes de la guerra, así como durante ella, sobre la situación en el norte de Israel y cómo fue dividida la responsabilidad entre él, el ministro de Defensa, Amir Peretz, y los líderes de las Fuerzas Armadas.
Olmert fue asistido durante el interrogatorio por el fiscal, Eli Zohar, su jefe de Gabinete, Yoram Turbowicz, y su secretario militar, Gadi Shamni.
La oficina del primer ministro se negó a hacer declaraciones sobre el testimonio de Olmert, pero entre otras cosas se esperaba que afirmara que Israel ganó la guerra, y que esta trajo muchas mejoras, la más importante el distanciamiento de Hezbolá de la frontera norte hebrea, el despliegue del Ejército libanés y de la fuerza de interposición de la ONU (UNIFIL) y la destrucción del arsenal de misiles de largo alcance de la milicia.
Asimismo, podría haber afirmado que la guerra fue la reacción al secuestro de dos soldados hebreos, que continúan secuestrados, por parte de Hezbolá y que fue la correcta, apoyada por todos los ministro del Gabinete.