Durante una reunión con representantes de asociaciones judías estadounidenses, el primer ministro israelí dijo que «en Francia se está desatando un antisemismo desenfrenado», al tiempo que subrayó que el «Gobierno francés ha tomado medidas» contra actos antisemitas y contra la propaganda antijudía.
El primer ministro israelí afirmó que «el hecho de que el 10% de a población francesa esté formada por musulmanes es un terreno de cultivo a una nueva forma de antisemitismo».
El presidente francés, Jacques Chirac, manifestó el pasado 16 de junio su deseo de que la Justicia pronuncie «penas ejemplares» contra los actos antisemitas, al reunirse con responsables de la comunidad judía que expresaron su preocupación.
Durante el primer semestre de 2004, los actos de antisemitismo (132) o racistas y xenófobos (95) registrados en Francia fueron más numerosos que durante todo el año 2003 (127 y 92), según el Ministerio francés del Interior.
Más de 2.000 franceses judíos emigran cada año a Israel. Su número se incrementó considerablemente en 2002, pero retrocedió ligeramente en 2003.