(EFE).- A tres días de las elecciones presidenciales en la Autoridad Nacional Palestina (ANP), el candidato de Al Fatah, Mahmud Abás (Abú Mazen), expresó su determinación a negociar la paz con Israel tan pronto como termine el proceso electoral.
«Después de los comicios, comenzaremos a negociar» con Israel, dijo hoy Abú Mazen en una rueda de prensa en la ciudad de Naplusa, la más poblada de Cisjordania y una de sus últimas etapas de campaña electoral.
«Pondremos la Hoja de Ruta en la mesa y le diremos que estamos dispuestos a aplicarla hasta el final», apuntó.
La Hoja de Ruta es el plan de paz que el Cuarteto de Madrid -formado por Estados Unidos, la ONU, la Unión Europea y Rusia- elaboró en 2003 para resolver el conflicto palestino-israelí.
Además, Abú Mazen, presidente de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) y principal aspirante a la presidencia palestina, afirmó que el primer ministro israelí, Ariel Sharón, puede ser un socio para la paz.
«No puedo decir que Ariel Sharón no sea un socio, pero si es serio o no en sus intenciones es algo que deberemos explorar», subrayó.
Las declaraciones de hoy del líder de la OLP contrastan con las que hizo en la franja de Gaza a comienzos de semana, cuando llamó a Israel el «enemigo sionista», una expresión empleada generalmente por la oposición islámica.
Abu Mazen concluirá mañana su campaña electoral en el distrito de Jerusalén, aunque por el momento no se sabe si será en la ciudad misma, bajo control de Israel, o en alguna de las aldeas palestinas a su alrededor.
El representante de Al Fatah, el más importante movimiento político palestino, fue recibido hoy en la Universidad de Al Nayah por unos mil estudiantes y habló en su patio central bajo una pancarta de las Juventudes de Al Fatah en la que se leía «nosotros con vosotros hacia un Estado, hacia el retorno (de los refugiados palestinos) y hacia Jerusalén».
En su discurso en ese centro de educación, donde comenzó hoy su visita a la ciudad de Naplusa a tres días del los comicios del domingo próximo, Abú Mazen afirmó que «no habrá una solución política para el conflicto mientras haya un solo palestino prisionero» en Israel.
Abu Mazen manifestó ante unos mil estudiantes que «los palestinos queremos una identidad y un Estado independiente con Jerusalén como capital».
Asimismo, prometió buscar una solución a los milicianos palestinos buscados por el Ejército israelí.
Entre silbidos de apoyo, Abú Mazen subrayó la importancia de «imponer el imperio de la ley» en los territorios palestinos, y de que sus organismos de seguridad «pongan fin al caos».
«Y a los refugiados palestinos -de la guerra de 1948- les digo que volverán» a sus hogares de origen, dijo Abu Mazen refiriéndose a unos cuatro millones de palestinos que residen principalmente en campos de Cisjordania, Gaza, y de otros en Líbano, Jordania y Siria.
Por la tarde, Abú Mazen visitó la ciudad vieja de Naplusa, en el corazón de la ciudad y un baluarte de las Brigadas de los Mártires de Al Aksa, brazo armado de Al Fatah.
Abú Mazen recorrió la calle de Al Naser asomado por la escotilla del vehículo en el que viajaba y fue recibido por cientos de palestinos que coreaban «Brigadas, Brigadas», mientras los principales miembros de esa facción armada en Naplusa besaban al candidato presidencial de Al Fatah.
La ANP impuso hoy estrictas medidas de seguridad en la ciudad de Naplusa, una de las localidades cisjordanas más afectadas por las agresiones del Ejército israelí, con decenas de miembros de sus fuerzas de seguridad en las principales calles.
Por su parte, el puesto de control de Hauara, la principal entrada a la ciudad Naplusa y normalmente bloqueado por el Ejército israelí, se encontraba hoy abierto durante la mayor parte del día.