Itongadol.- La decisión adoptada ayer por la Corte Suprema de Justicia de abolir la ley que permite la detención infiltrados hasta tres años, causó la ira de los residentes de los residentes del sur de Tel Aviv, quienes sostienen que son los perjudicados.
Los residentes tienen la intención de salir esta tarde, martes, para manifestarse e instar al Gobierno a encontrar una solución alternativa frente a la dramática situación.
“Esta decisión le da legitimidad a otros miles de infiltrados por venir”, expresó Shlomo Maslawi, presidente del Comité sobre infiltrados y miembro del Consejo municipal Tel Aviv, en el programa “Orly y Gay”, transmitido por el canal 10 de la televisión israelí. “No tenemos porque recibir a todos los infiltrados. La vida de los residentes- en referencia a Tel Aviv Sur- es un infierno”, expresó Maslawi.
Según dijo, “en los barrios había muchas expectativas. La gente ya no entiende y la situación no puede continuar así”.
Contrariamente, el abogado Assaf Weitzen, uno de los que presentó la petición en la Corte Suprema, dijo en el programa televisivo que una posible solución a la difícil situación de los infiltrados que piden asilo y de los residentes del sur de Tel Aviv es mediante la entrega de permisos de trabajo a los mismos. “La primer cosa básica que resolverá la mayoría de los problemas es tratarlos como seres humanos, permitirles trabajar”, dijo el Weitzen en referencia a los infiltrados, quienes llegan de África y cruzan a través del Sinaí hacia Israel.
Para el abogado, “desde el momento en que tienen un documento que les permita trabajar, ellos no deberán vivir todos juntos en un edificio de Tel Aviv”.
En relación al desempeño de la Knesset y el Gobierno en cuanto a la situación de los residentes del sur de Tel Aviv, Weitzen sostuvo que “los políticos hacen promesas todo el tiempo, y finalmente no hacen nada. No ofrecen ninguna solución alternativa”.
En el marco de la decisión de la Corte Suprema, el Estado debe examinar de inmediato la liberación de unos 2.000 infiltrados que actualmente están encarcelados en instalaciones en Israel.
"La ley de prevención de la Infiltración es inconstitucional porque perjudica el derecho constitucional a la libertad, fijado por la ley: dignidad y libertad humana", reza la resolución.
"El encarcelamiento de Infiltrados y la privación de libertad por un largo periodo de tres años es un golpe grave desproporcionado que golpea sus derechos, cuerpo y espíritu", escribió el juez Edna Arbel.