(EFE).- El primer ministro palestino, Ahmed Qurei, analizó hoy con autoridades egipcias y de la Liga Arabe el papel que desempeñará El Cairo en la franja de Gaza tras la eventual retirada israelí unilateral de ese territorio.
Qurei se reunió en esta capital con el jefe de los servicios secretos del país, Omar Suleiman, que protagoniza un papel mediador entre los palestinos e Israel, antes de hacerlo con Usama el-Baz, el principal asesor político del presidente egipcio, Hosni Mubarak.
También se entrevistó con el secretario general de la Liga Arabe, Amro Musa, quien ha recibido con beneplácito el plan de El Cairo de enviar expertos a Gaza para formar a las fuerzas de seguridad palestinas y reducir la violencia en esa franja fronteriza con Egipto.
Qurei aseguró ante Musa y las autoridades egipcias que ninguno de los grupos palestinos, incluidos los radicales Hamas y la Yihad Islámica, tiene reservas respecto a la presencia de expertos de seguridad egipcios en territorios palestinos.
Indicó, asimismo, que la Autoridad Nacional Palestina (ANP) ha puesto un mecanismo para mantener un diálogo permanente con las diferentes facciones palestinas, y aseguró que «habrán contactos diarios y reuniones mensuales» entre representantes de todos los grupos.
«Fortalecer ese diálogo y llevarlo al nivel que deseamos es una de las tres principales tareas de Egipto, país que acogerá próximamente una nueva ronda de conversaciones interpalestinas», dijo el primer ministro de la ANP.
«Otra misión egipcia será la de ayudar a formar nuestras fuerzas de seguridad para que sean capaces de preservar la paz y la soberanía de la Ley en los territorios palestinos», añadió Qurei tras su encuentro con Musa.
Explicó que la diplomacia egipcia también se esforzará para descongelar el paralizado proceso de paz con Israel, y hacer que el plan de ese país para retirarse de forma unilateral de Gaza «no lleve a abandonar la ‘Hoja de Ruta», la iniciativa propuesta por el Cuarteto de Madrid.
«Para que este papel egipcio tenga éxito, el Cuarteto -Estados Unidos, Rusia, la Unión Europea y la ONU- tiene que apoyarlo, especialmente EEUU. También Israel debe comprometerse a no realizar cualquier acción inaceptable cuando Egipto comience a formar las fuerzas de seguridad palestinas», agregó.
Aseguró, por otro lado, que la ANP no se opone a la presencia de expertos de seguridad de otros países árabes en Gaza, pero subrayó «todo debe realizarse en coordinación» con Egipto, cuyo papel «será el principal».
El presidente egipcio, cuya reunión con Qurei fue cancelada, por motivos hasta el momento desconocidos, ha defendido por su parte la decisión de enviar soldados de su país y, por primera vez, no descartó hacerlo en una segunda fase a Cisjordania, donde nunca se han desplegado tropas egipcias.
Mubarak hizo el anuncio en una breve e inesperada rueda de prensa que convocó el miércoles tras reunirse con el ex director de la norteamericana Agencia Central de Inteligencia (CIA), George Tenet, y que según medios árabes tuvo también el objetivo de mostrarse en público para desmentir los rumores sobre su presunto mal estado de salud.
«Hemos ofrecido a los palestinos el envío de asesores militares para que formen a sus fuerzas de seguridad a fin de preservar la paz y detener los actos de violencia», afirmó el mandatario egipcio para justificar el despliegue en Gaza, territorio que estuvo bajo la administración de El Cairo hasta 1967.
De acuerdo con fuentes diplomáticas, el eventual destacamento de soldados egipcios en Cisjordania podría provocar tensiones entre Egipto y Jordania, ya que este último país ha sido el estado árabe que ha servido hasta ahora de principal interlocutor en los asuntos referidos a ese territorio palestino.