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A partir del año 2012, los torneos de Fútbol y tenis desarrollados por FACCMA llevan el nombre de deportistas y dirigentes destacados del movimiento macabeo para de esa forma darle difusión a sus historias de vida y honrar su figura y sus acciones.
En esta oportunidad, el torneo de fútbol lleva el nombre de José Furmansky, destacado dirigente comunitario macabeo y el de Judith Deutsch, nadadora austriaca que defendió en los años 30 la dignidad judía negándose a ser parte de los juegos olímpicos del ‘36, a sabiendas de que sus hermanos judíos en Alemania eran discriminados y no podían ser parte de los juegos.
Torneo de fútbol de campo 2012: José Furmansky Z’L
Es muy difícil hablar sobre José Furmansky z’l – Zijrono lebrajá – en tiempo pasado. Sus aportes cotidianos, su don de gente, su capacidad para tomar siempre decisiones sabias, su voluntad y esfuerzo para llegar al objetivo.
José, fue un pionero de la ideología macabea, promoviendo los ideales del espíritu que tanto se habla y es difícil explicar, de identidad judía y sionismo, aun en momentos muy difíciles para los judíos en el mundo y en Argentina.
Su tarea como dirigente se desarrolló dentro del Movimiento Macabeo en el marco de su institución que lo vio crecer: la Organización Hebrea Argentina Macabi, luego FAM, FACCMA y en la Confederación Latinoamericana Macabi – CLAM, instituciones que él presidió con su gran sabiduría. En todas ellas cimentó la labor de muchos jóvenes líderes que se nutrieron de sus enseñanzas y su saber.
Integró las Delegaciones Argentinas en distintos Juegos Macabeos Panamericanos y Macabeadas Mundiales como presidente y como miembro de la organización de las mismas. También fue miembro del Tribunal de Honor y consultor permanente de Unión Mundial Macabi.
Integró cargos destacados comunitarios en AMIA, el Hogar Israelita para ancianos y niños, y en el inicio de la Fundación TZEDAKA. Su designación como Yakir Macabi, máximo reconocimiento del Movimiento Macabeo Mundial y el recibimiento del Premio SHEM TOV entregado por la FACCMA en 2010 por su trayectoria como dirigente en la O.H.A. Macabi, engalanan su trayectoria.
¡Si lugar a dudas fue un líder indiscutido!
Honramos su memoria y nos despedimos de él como siempre le gustaba decir con mucho sentimiento… Jazak Veematz.
Torneo de tenis 2012: Judith Deutsch
En su extraordinaria película documental “Watermarks” (“Hakoach lischot”, en hebreo), Yaron Zilberman nos retrotrajo al heroísmo de tres adolescentes que se negaron a honrar a los nazis: Judith Deutsch, Ruth Langer y Lucie Goldner, todas miembros del equipo competitivo de natación del legendario Club Hakoah Viena, el club judío más famoso del mundo y pletórico de éxitos deportivos internacionales.
El caso de Judith es particularmente notable, porque ella había conquistado los más altos títulos en natación, estableciendo en Hakoah Viena los récords nacionales austriacos, y siendo elegida por la Autoridad de Deportes de Austria como la Atleta Excepcional Femenina de 1935, y campeona en los 100, 200 y 400 metros de natación estilo libre. Ella rompió 12 récords nacionales en un solo año.
Siendo niña, la mayoría de los clubes atléticos de Austria rechazaron a Judith Deutsch por su condición de judía, ingresando entonces en Hakoah Viena para desarrollar sus talentos en la natación. En 1936, Austria le adjudicó la Insignia de Oro de Honor como una de los tres mejores atletas del país ese año, siendo consecuentemente seleccionada para representar a Austria en los Juegos Olímpicos de 1936 – que tomarían lugar en la Alemania nazi, bajo el podio de Hitler y sus secuaces.
Al igual que muchos de los miembros y atletas macabeos de todo el mundo de hoy, Judith decidió participar en la 2da Macabiá en 1935, representando a Macabi Austria. En ese Macabiá, los deportistas de Macabi Alemania le compartieron a Judith lo que estaba sucediendo en la Alemania nazi: “Es casi imposible para un judío participar en un deporte, cualquiera que fuere. Hemos sido expulsados de escuelas y clubes deportivos. La situación es desastrosa.”
Judith Deutsch, Ruth Langer y Lucie Goldner, las principales miembros del equipo olímpico nacional austriaco de natación, todas ellas adolescentes, tomaron entonces una decisión de conciencia: ellas no participarían de “los Juegos Olímpicos de Hitler”, los Juegos Olímpicos de 1936 en Berlín.
En su carta de dimisión al Comité Olímpico de Austria, Judith Deutsch escribió: “Yo protesto… Como judía, no puedo participar en los Juegos Olímpicos de Berlín. Mi conciencia no me lo permite. Se trata de una decisión personal e irreversible. Yo entiendo completamente que estoy renunciando a mis derechos a participar como concursante por parte de Austria en los Juegos Olímpicos. Sinceramente espero que entiendan esta decisión y que no me presionen para cambiar de opinión”.
La respuesta del Comité Olímpico Austriaco fue rápida y brutal. Deutsch estaba en el período pico de su carrera como atleta. Se le prohibió tomar parte en todas las instancias nacionales e internacionales de natación – todas las competiciones durante dos años -, y fue excluida de todos los Juegos Olímpicos futuros.
Después de que ella abandonó Austria, las autoridades deportivas de ese país la despojaron de sus títulos y eliminaron su nombre de los libros de récords nacionales, como si ella nunca hubiese existido.
El padre de Judith había decidido emigrar a Palestina antes de que fuera demasiado tarde. La familia se estableció en Haifa, la única ciudad con una piscina de tamaño olímpico. Ella pronto se convirtió en campeón nacional de natación en 1939 y representó a la Universidad Hebrea de Jerusalem en los Juegos Internacionales Estudiantiles celebrados en Mónaco – donde ganó una medalla de plata un día antes del estallido de la Segunda Guerra Mundial. Es la única medalla de Judith conservó.
Fue la macabea Rivka Rabinowitz – presidente del Consejo del Movimiento – quien logró un acto de justicia tardía para Judith. En 1995, Rivka escribió una carta a Othmar Bricks, presidente de la Liga de Natación de Austria, explicando la injusticia cometida contra esa entonces muy joven muchacha.
Bricks respondió, después de leer la carta de Rivka: “… Me he enrojecido de la vergüenza, de la humillación y del enojo. Me siento profundamente avergonzado por la decisión que asumieron en ese momento”. Bricks invitó a Judith a Austria para hacer un acto de reparación, restablecerle sus títulos y volver a introducir su nombre en los registros del libro oficial de la natación austriaca.
Tras recibir la carta oficial con la presentación de excusas, Deutsch se negó a ir a Austria a título oficial, diciendo: “…Ellos me echaron una vez de ese país. Si quieren devolverme mis títulos, pueden hacerlo en Israel”. Y así, en una emotiva ceremonia celebrada en Kfar HaMacabiá en junio de 1995, el embajador de Austria en Israel, Dr. Herbert Karol, dio lectura a una carta oficial de disculpas escrita por el doctor Heinz Fischer, Presidente del Parlamento austriaco, en la que expresó: “… Lamentamos profundamente lo ocurrido. Tal vez estemos pidiendo disculpas demasiado tarde, pero mejor ahora que nunca”.
Todas las sanciones contra Deutsch fueron levantadas y todas sus medallas y títulos restaurados.
Judith falleció en 20 de noviembre de 2004 en Medinat Israel.
Es su ejemplo, lo que queremos que perdure y que su nombre sea siempre para nosotros, los deportistas macabeos un emblema del movimiento, por eso, elegimos su historia y su enseñanza para denominar al torneo de tenis.