El Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamás) ha rechazado la convocatoria de elecciones anticipadas, anunciada hoy por el presidente palestino, Mahmud Abás, durante un discurso pronunciado en Ramala.
El ministro de Asuntos Exteriores y destacado dirigente de Hamás, Mahmud A-Zahar, ha rechazado la medida por la cual Abás pretende fijar una fecha para adelantar los comicios presidenciales y legislativos.
«Rechazamos la convocatoria del presidente Abás a elecciones anticipadas, si se ha cansado de la situación debería dimitir él. Prometo al pueblo palestino que, con la ayuda de Alá, no habrá comicios anticipados», afirmó A-Zahar.
Sin embargo, en Israel, se ha considerado que «es una importante decisión interna de los palestinos, y crea una nueva posibilidad para erradicar el terrorismo, volver a la mesa de negociaciones (con Israel), y crear una nueva realidad en Oriente Próximo», según dijo un oficial de las Fuerzas Armadas de Israel, citado hoy por la radio pública.
El Gobierno del primer ministro Ehud Olmert se mantenía aun en silencio por ser la de hoy la jornada ritual del descanso hebreo, que finalizará esta noche, al comenzar la semana laboral en el país.
Olmert anunció hace días el deseo de reunirse «sin condiciones» con Abás para reanudar el proceso de paz, y en medios políticos no se descarta una posible reunión entre ambos en enero próximo, en ocasión de una prevista visita de la secretaria de Estado Condoleezza Rice, de Estados Unidos.
Abás, en una alocución por televisión después de una semana de choques armados entre milicianos del Movimiento Islámico (Hamas) y de la histórica organización nacionalista Al Fatah, afirmó que es su «derecho constitucional» adelantar las elecciones, y «no tememos» a quienes amenazan, entre los integristas, sobre una guerra civil.
Un asesor político de Abás, Yaser Abed Rabo, dijo hoy a los periodistas que los comicios pueden celebrarse en un plazo máximo de tres meses, pero el encargado de las negociaciones con Israel en la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Saeb Erekat, dijo que no cree que sea antes de medio año.
En medio de temores sobre posibles choques armados entre milicianos de Al Fatah y de Hamas, centenares de miembros de las Brigadas de Al Aksa se manifestaron esta tarde en la ciudad cisjordana de Tulkarem, municipio controlado por ese movimiento integrista, y festejaron disparando al aire el anuncio de Abás.
Por su parte, mil militantes de Al Fatah, el movimiento del fallecido presidente Yaser Arafat, anunciaron esta tarde que atacarán a personalidades de Hamas si sus milicianos atentan contra el coronel Mohamemd Dahlán, a quien acusan de haber intentado asesinar hace dos días al primer ministro Haniye en Gaza.
La decisión del presidente Abás, líder de Al Fatah, ha sido rechazada por el Gobierno del primer ministro del Gobierno de la ANP, Ismail Haniye, que aboga por un gobierno de unidad nacional, algo a lo que Abás renunció tras meses de infructuosas negociaciones.
Distintas personalidades de Hamas acusan a Abás de pretender «derrocar al Gobierno democráticamente elegido en enero de este año» con el anuncio de elecciones anticipadas a fin de conjurar la crisis interna, alimentada por el boicot internacional contra el Gobierno de Hamas.
«Volvamos al pueblo, escuchemos su voz, y dejemos que él juzgue», dijo Abás, de 70 años, y heredero político de Arafat.