Itongadol.- Hoy, último día de Janucá, la fiesta de los milagros, queríamos agradecer a todos los que nos apoyaron este año y nos ayudaron a iluminar un poco las vidas de los soldados heridos de Tzahal y sus familias.
La lucha de regreso a la vida, acompañará a ellos y a las familias por el resto de sus vidas. Los soldados heridos de Tzahal se sienten orgullosos de pertenecer al pueblo judío.
Agradecemos a todos los que contribuyeron, cada uno a su manera, por nuestro bien estar.
Para donaciones a los soldados heridos de Tzahal – www.zdvo.org/es
Compartimos la bendición para Janucá de Yeuda Persi, soldado herido ciego de Tzahal, quien vivió los milagros.