Itongadol.- Ver video AQUÍ. Estamos aquí reunidos porque no queremos ni debemos acostumbrarnos a la muerte. A esas muertes que no forman parte del orden natural, esas muertes que nos conmocionan y nos llenan de preguntas.
Somos los ciudadanos comunes, sin banderas políticas de ningún tipo, quienes hoy nos sentimos absolutamente desamparados y llenos de incertidumbre.
Hace tan sólo siete días nos sorprendíamos con la denuncia que el Fiscal de la Causa AMIA, el Dr. Alberto Nisman, hacía sobre un plan, que involucraría al más alto nivel del Gobierno Nacional, para desviar la investigación y limpiar el nombre de aquellos iraníes imputados por la justicia argentina como los máximos responsables del atentado terrorista del 18 de julio de 1994.
La noticia nos conmovió pero, una vez más, decidimos ser prudentes porque es a la justicia a quien le corresponderá investigar y expedirse sobre la veracidad de las pruebas que se presentan en esta denuncia, que recién ayer por la noche se difundió públicamente.
Sólo cuatro días más tarde y pocas horas antes de acudir al encuentro que se había acordado con integrantes del Congreso Nacional, el mismo Fiscal aparece sin vida en circunstancias que por el momento dejan enormes dudas.
Una vez más la muerte. Una vez más el sentimiento de impotencia. Una vez más una familia destrozada, dos hijas que se quedan sin su padre, una madre que llorará por siempre a su hijo. Casi nadie se ha acordado de ellos en estas últimas horas porque las mezquindades políticas suelen olvidarse de las personas. Es por ello que queremos expresar nuestras profundas condolencias a la familia, porque hoy nada es más importante que respetar su dolor y acompañarlos en este proceso tan penoso.
No están esclarecidas las causas de la muerte del Fiscal Nisman y dicho esclarecimiento resulta ser hoy un imperativo de máxima prioridad para toda la sociedad.
El fallecimiento del fiscal Nisman es un hecho que enluta a la república, a la justicia, a la Causa AMIA y que nos llena de tristeza a todos aquellos que hemos tenido el honor de conocerlo a lo largo de estos años.
Argentina perdió al fiscal que estaba investigando el atentado terrorista más grave de su historia, por el que las 85 víctimas fatales aún claman por justicia. Por sus investigaciones hoy sabemos que el atentado fue decidido y planeado en las más altas esferas del gobierno iraní de aquella época, y ejecutado por agentes iraníes y por miembros del Hezbollah.
Tanto por su enorme compromiso como por su profundo conocimiento de la causa, el fiscal Nisman será irreemplazable. Su muerte constituye un duro golpe a la investigación. Sin embargo, y a pesar de ello, en estos difíciles momentos queremos expresar, tan enfáticamente como sea posible, que no permitiremos que la muerte del fiscal Nisman sea también la muerte de la Causa Amia y que en honor a su legado y a la memoria de las 85 víctimas del atentado, jamás cejaremos en nuestro empeño por encontrar la verdad y enjuiciar y condenar a los culpables.
Por eso desde aquí pedimos a Interpol y a la comunidad internacional toda, que no se abandone el reclamo argentino respecto de las personas que hoy tienen pedidos de captura internacional emitidos por la Justicia argentina. Exigimos además a todos los poderes del estado que se redoblen los esfuerzos por esclarecer el caso y llevar a todos los responsables a que rindan cuenta ante la Justicia. Que se arbitren los medios para que se pueda continuar con las investigaciones del fiscal Nisman, que se mantenga su equipo, que se lo refuerce, y que se pongan todos los medios y recursos del Estado a su disposición.
Es muy angustiante vivir en un país donde cualquier hipótesis, por más disparatada que parezca, a todos nos resulte verosímil. No queremos más supuestos, más rumores, más trascendidos. Queremos y exigimos solamente la verdad.
Es triste pensar que cuando pasen un par de semanas, cuando Argentina o el mundo nos de la primicia de una nueva tragedia, el foco de atención se trasladará y el silencio sobre la falta de avances en la investigación por la causa AMIA, se apoderará nuevamente de la escena.
Somos absolutamente respetuosos de la Justicia y queremos que trabaje con total libertad. Después de 20 años, la falta de justicia sumada al paso del tiempo tiene como resultado una sola definición: IMPUNIDAD.
El terrorismo internacional que golpeó dos veces en nuestro país hoy sigue desangrando al mundo entero. Lo vemos cada día en imágenes que nos estremecen. Lo venimos denunciando hace muchísimo tiempo. Las sociedades libres y democráticas no pueden permitir que sus pueblos se acostumbren a convivir con amenazas, atentados y el más aberrante desprecio por el valor supremo de la vida.
Las autoridades argentinas durante estos 20 años tienen una gran cuenta pendiente. Mientras tanto, la Causa AMIA se sigue cobrando vidas.
85 asesinados con la explosión de la bomba.
1 Fiscal de la Nación a cargo de la investigación muerto en circunstancias dudosas.
Más de 40 millones de argentinos que no podemos quedarnos en silencio.
No queremos nada menos que la verdad. No exigimos nada más que la justicia.
Muchas gracias por acompañarnos.