Itongadol.- El sistema israelí de alerta de misiles que adquirió Ucrania permitirá salvar la vida de cientos de personas además de ofrecer una solución eficaz y de bajo costo a corto plazo para evitar que se agoten las municiones hasta que pueda realizarse este reabastecimiento.
Mientras Ucrania se enfrenta a ataques regulares contra sus ciudades, se ve obligada a derribar drones y misiles rusos.
El sistema de alerta temprana de Israel, que según The Jerusalem Post comenzó a utilizarse en Kiev esta semana, puede identificar proyectiles entrantes, calcular dónde impactarán y de cuánto tiempo disponen los civiles para buscar refugio.
Este sistema salvará vidas ucranianas al advertirles de los ataques y permitirles protegerse.
El sistema también informará a los militares ucranianos si es necesario interceptar un misil o un dron, con lo que se ahorrarán valiosas municiones.
La Cúpula de Hierro de Israel se utiliza de esta manera. Los costosos interceptores Tamir no se disparan si se prevé que los cohetes de Gaza caerán en zonas abiertas. Si los militares ucranianos saben que los misiles rusos no darán en el blanco, pueden ahorrar munición.
En un escenario más extremo, los defensores ucranianos pueden reservar su munición si creen que los civiles tienen tiempo y aviso suficientes para llegar a los refugios antes de que impacten los proyectiles.
El intento de Ucrania por conseguir aviones occidentales y sistemas de defensa aérea de la OTAN
Ucrania está tratando desesperadamente de conseguir aviones occidentales y sistemas de defensa aérea de la OTAN para intentar tapar los agujeros de su red aérea. La ayuda no letal israelí de un sistema de alerta temprana puede ser una contribución vital en el esfuerzo de guerra.
Los documentos del Pentágono filtrados en abril revelaron la vulnerabilidad de los sistemas de defensa antiaérea de Ucrania, pero la introducción esta semana del sistema israelí de alerta temprana de misiles puede ser una solución a corto plazo para salvar la tensa defensa antiaérea de Kiev.
Rusia lleva más de un año bombardeando ciudades y posiciones militares ucranianas con andanadas de misiles, drones y proyectiles de artillería.
Varias personas se ponen a cubierto mientras suena una sirena antiaérea, cerca de un edificio de apartamentos dañado por los recientes bombardeos en Kiev, Ucrania, 26 de febrero de 2022. (Crédito: GLEB GARANICH/REUTERS)
Los defensores ucranianos derriban muchos de estos ataques, pero se trata de victorias que generan con muy poca ventaja sobre el derrotado.
Aunque en ocasiones Rusia trató de destruir la infraestructura ucraniana, las agencias de inteligencia occidentales también evaluaron que el Kremlin intentó sobrecargar las defensas aéreas ucranianas.
Si se eliminaran las defensas aéreas ucranianas de la ecuación militar, Rusia tendría más posibilidades de lograr la superioridad aérea que se le niega desde hace tiempo sobre el espacio aéreo ucraniano y los aviones rusos podrían lanzar incursiones en territorio ucraniano. Al disminuir el temor a la interceptación, los ataques aéreos serían más precisos, cuantitativos y duraderos.
Esto pondría en mayor peligro todas las facetas de la estructura militar ucraniana.
La aviación rusa prestaría apoyo aéreo con mayor libertad a las fuerzas terrestres contra las tropas ucranianas, amenazando la rumoreada contraofensiva inminente. Los arsenales de munición y los depósitos de vehículos serían vulnerables, incluidos los tanques de combate occidentales que Ucrania reunió poco a poco. Además, la tambaleante logística rusa se vería reforzada, ya que los lanzamientos aéreos podrían utilizarse con mayor libertad.
Las filtraciones de los servicios de inteligencia estadounidenses proporcionaron una instantánea de las condiciones en Ucrania en marzo, indicando que las defensas de Kiev eran realmente vulnerables. Las condiciones exactas pueden haber cambiado a medida que los aliados intentan resolver el problema, pero es probable que la cuestión general se mantenga.
Ucrania se está quedando sin su armamento ruso de defensa antiaérea y no dispone de suficientes municiones o plataformas de la OTAN para sustituirlo.
Las reservas ucranianas de misiles para las plataformas de misiles tierra-aire BUK y S-300, de fabricación soviética, debían agotarse el 31 de marzo y el 2 de mayo, respectivamente. Según se informa, estos sistemas constituyen el 89% de las defensas antimisiles de medio y largo alcance de Ucrania. Se estima que las defensas antiaéreas de medio alcance quedarán inertes el 23 de mayo.
El agotamiento de las municiones de mayor alcance hace que se dependa en exceso de los sistemas aéreos de menor nivel, como las armas de menor alcance lanzadas desde el hombro, amenazando también con su uso excesivo.
El Pentágono ofrecía muchas soluciones a corto plazo en estos documentos, entre ellas entregar más munición de fabricación rusa, acciones ofensivas contra los drones y misiles del Kremlin y el bloqueo de objetivos en los aviones para simular que van armados. Pero la idea principal era prolongar el servicio de las plataformas y misiles existentes hasta que hubiera suficientes armas de fabricación occidental en Ucrania para reemplazarlas.