«Aclaramos a Rusia que Siria apoya el terrorismo y transfiere armamento a (la milicia libanesa de) Hizbulá. Todo el mundo procura aislarla. Estamos convencidos de que (el presidente ruso Vladimir) Putin no afectará la estabilidad en Oriente Medio», dijo Shalom durante una rueda de prensa conjunta con el Alto Representante de Política Exterior y Seguridad Común de la UE, Javier Solana.
Se trata de una venta de misiles de mediano alcance y otros del tipo SA-18, que se disparan desde el hombro y pueden derribar aviones militares o comerciales a una altura de 3.500 metros. La operación, por más de 1.000 millones de dólares, la concretaría el presidente sirio, Bachar Al Asad, cuando visite Moscú en dos semanas.
«Estamos seguros de que el presidente Putin no hará algo que pueda afectar la estabilidad en esta zona», dijo por su parte Solana, con quien habló hoy Shalom acerca de esa operación, que negó en Washington el ministro ruso de Defensa, Sergei Ivanov.
Rusia es uno de los integrantes del Cuarteto de Madrid, junto con Estados Unidos, la Unión Europea (UE) y la ONU, cuya plan de paz, la «Hoja de ruta», debe servir a israelíes y palestinos para reanudar sus negociaciones, estancadas desde hace más de cuatro años.
Los israelíes dicen que Siria podría entregar esos misiles a la milicia de Hizbulá y ésta a las facciones islámicas de la resistencia palestina.
La supuesta transacción, que al parecer Siria pagará con ganancias obtenidas por el alza de los precios del petróleo a raíz de la crisis en Irak, también es criticada por Estados Unidos, que considera al Gobierno sirio como un régimen «que apoya el terrorismo».
14/10/2024