Itongadol.- “Me encuentro en una breve travesía por América Latina -ya visité San Pablo- y el objetivo principal es vincular las iniciativas de emprendedores e inventores locales con lo que hacemos en la Universidad de Tel Aviv, que en los últimos años se ha convertido en un centro de estudios y formación en innovación y emprendedurismo”, explicó su presidente, Joseph Klafter (a la izquierda en la foto), a la Agencia Judía de Noticias (AJN).
“Tenemos grupos de China, India, Singapur y Europa y pensé que también se le podía ofrecer a América Latina este nexo, por el cual aprendemos de vuestro emprendedurismo y los emprendedores que nos visitan aprenden qué tiene Israel para ofrecer en su rol de Start-Up Nation”, denominación en inglés que refiere a una nación innovadora en alta tecnología, prosiguió.
En ese marco, “próximamente llegará la segunda delegación de emprendedores y empresarios de Brasil, que irán a aprender qué pasa en la Universidad y a vincularse con empresas israelíes; la primera fue hace casi un año y cada una tiene unas 30 personas”, ejemplificó el funcionario.
“Nunca hubo un vínculo demasiado grande (con los jóvenes latinoamericanos) y para eso vine: para ayudar a esas relaciones abrimos dos programas con título de grado, en Artes liberales y en Ingeniería industrial, que puede estudiarse en inglés, y si ya son graduados, pueden hacer 14 programas y Másters en inglés, y obviamente también pueden hacer doctorados; así que estamos listos para recibir y absorber a estudiantes”, anunció.
En tanto, respecto de los jóvenes israelíes, “la idea es que vengan acá para estudiar y cooperar y no solo para un paseo al terminar el Ejército”, aclaró Klafter.
“Hace unas semanas se hizo un evento muy importante en la Argentina, Innovation Day, una iniciativa de gente que alguna vez estuvo en la Universidad de Tel Aviv o está de algún modo vinculada a ella, y eso realmente impulsó nuestra voluntad de abrir las puertas: todo el que tenga ideas o quiera aprender de la experiencia que hay en Israel está invitado a venir, y nos referimos a la población general, no solo a los judíos”, agregó el director del Departamento para América Latina de esa entidad, Herman Richter (a la derecha en la foto), a AJN.
“Siempre preguntan qué hace de Israel una especie de lugar de peregrinación en lo que respecta a emprendedurismo, creatividad e innovación, y una de las explicaciones es el hincapié que siempre pusimos en la enseñanza: la educación superior comenzó mucho -casi 30 años- antes de la creación del Estado y éste es un maravilloso mensaje de que todo empieza con la formación, ya sea en valores o cultura general”, proclamó el presidente de la Universidad de Tel Aviv.
En esta línea, tanto su país como su institución “crean una cultura completa de investigación, educación y espíritu emprendedor”, resumió.
Por otra parte, “la Universidad de Tel Aviv tiene un espíritu muy joven -el año que viene celebraremos los 60 años- y su ambiente es muy novel, transmite mucha apertura y pluralismo y está ubicada en la capital cultural de Israel, todo lo cual nos pone en un lugar ciertamente central, y diría que si Tel Aviv fuese el Silicon Valley, la Universidad sería como Stanford o Berkeley; es decir, el sitio del cual surgen graduados que actúan y hacen la industria”, aseguró Klafter.
“Este año, en Silicon Valley hicieron un estudio entre miles de universidades para ver cuáles produjeron graduados que triunfaron con su start-up (empresa innovadora en alta tecnología) y la Universidad de Tel Aviv, en el pequeño Israel, en el lejano Medio Oriente, está en el 9º lugar en el mundo, detrás de Stanford, Harvard o el MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts)”, se ufanó.
Asimismo, “la Universidad (de Tel Aviv) atraviesa un proceso absurdo de construcción de ocho nuevos edificios, continuamos con la ampliación del plantel profesional -estamos hablando de unas 300 incorporaciones en los últimos 5 años, una cantidad enorme- y comenzamos muchos programas nuevos”, informó su titular.
Pero por sobre todo, “somos el centro nacional de la ciberseguridad, que constituye uno de los mayores problemas existentes, y todo el tiempo estamos desarrollando vínculos internacionales y combatiendo por este medio al BDS (movimiento que impulsa Boicot, Desinversión y Sanciones a Israel); la prueba es que vienen estudiantes que apoyan a Israel por lo que es y no por lo que se ve en la televisión”, diferenció.
Es que “el mundo se globalizó, los estudiantes viajan de un país a otro y hay cooperación entre investigadores que hacen lo propio porque gran parte de la ciencia es intercambiar ideas y los alumnos también quieren ampliar su horizonte”, finalizó Klafter.