(Estocolmo) Durante esta semana se darán a conocer los galardonados con los Premios Nobel, la distinción más prestigiosa del mundo concedida por la Academia Sueca a los trabajos más meritorios en Física, Química, Medicina, Economía, Literatura y en contribución a la Paz, medalla para la que este año suena con fuerza el nombre del checo Vaclav Havel.
Como viene siendo habitual, durante la semana se anunciarán los nombres de los premiados en cada una de las categorías, salvo en la Literatura, que se fallará después. El primero será el de Fisiología y Medicina, dado a conocer mañana antes del mediodía, al que seguirán el de Física el martes, el de Química el miércoles, el de la Paz el viernes y el de Economía el lunes 11.
Los expertos en apuestas piensan que el ex presidente checo Vaclav Havel tiene muchas posibilidades de llevarse el premio de la Paz de este año e incluso se atrevieron hace tres semanas a elaborar una lista en la que el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, figura en el último lugar.
Por su parte, el Nobel de Literatura será un año más fiel a la tradición de darse a conocer de forma separada al resto –quizás este jueves o el que viene– y estará rodeado como de costumbre de una gran expectación. Este año resuenan con especial fuerza los nombres de mujeres, marginadas por la Academia Sueca y convertidas en 2004 en firmes aspirantes con nombres como la argelina Assia Djebar, la norteamericana Joyce Carol Oates y la danesa Inger Christensen, según los especialistas.
Una mala noticia para las letras en castellano podría ser que el peruano Mario Vargas Llosa, que durante mucho tiempo fue mencionado como uno de los posibles galardonados, hubiera sido eliminado de la lista, como predijo esta semana el director de Norstedts, una de las principales editoriales suecas, Svante Weyler, que predice la misma suerte para el holandés Cees Nooteboom y el belga Hugo Claus.
Sin embargo, la hipotética exclusión de Vargas Llosa contrasta con una buena noticia para el español, la de que el nombre del novelista Alvaro Pombo circula en los ambientes literarios de Estocolmo junto a las poetas Friederike Mayroecker, de Austria, y Vizma Belsevica, de Letonia, el poeta ruso Gennadij Ajgi, los novelistas húngaros Peter Esterhazy y Peter Nadas, el somalí Nuruddin Farah y una favorita desde hace muchos años, la canadiense Margaret Atwood.
Por otra parte, hasta ahora la Academia Sueca tan sólo ha galardonado a nueve mujeres desde que el premio se otorgó por primera vez, en 1901. En 1996 fue atribuido a la poeta polaca Wislawa Szymborska y antes de ella, en los noventa, lo recibieron escritoras como la afro-norteamericana Toni Morrison y la sudafricana Nadine Gordimer.
El año pasado fue galardonado el sudafricano J. M. Coetzee y el anterior el húngaro Imre Kertesz. Mientras algunas voces aseguran que la Academia es sensible a la opinión pública, librerías como la prestigiosa Akademibokhandeln de Estocolomo dicen prepararse para el anuncio exhibiendo un mostrador especial de potenciales ganadores, entre los que figura su predilecto, la autora Joyce Carol Oates.
NOBEL DE LA PAZ
La página de Internet australiana especializada en apuestas sobre los Nobel ‘Centrebet’ sitúa en el lugar más alto entre los aspirantes al Nobel de la Paz a Vaclav Havel, disidente histórico, héroe de la ‘Revolución de Terciopelo’ de 1989 y jefe del Estado checo hasta 2003. En segundo lugar de la lista figura el director general de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA), Mohamed ElBaradei.
Junto a estas dos personalidades, este año compiten por el premio 194 personas e instituciones, una cifra récord en la figuran personas que ya habían sido citadas en ediciones anteriores pero que no consiguieron el premio, como los senadores estadounidenses Richard Lugar y Sam Nunn, que luchan por el desarme nuclear, y el sueco Hans Blix, ex jefe de los inspectores de las Naciones Unidas en Irak.
En la lista de favoritos también figuran el israelí Mordechai Vanunu, liberado en 2004 después de haber pasado 18 años de prisión por haber revelado la existencia del programa nuclear de su país, el disidente cubano Oswaldo Payá y el papa Juan Pablo II, junto a aspirantes con menos posibilidades a priori, como el cantante Bono del grupo de rock U2; el presidente de Pakistán, Pervez Musharraf o el primer ministro indio, Atal Behari Vajpayee.
El último lugar de la lista, el 1.001, lo ocupa el presidente Bush junto a los primeros ministros británico, Tony Blair y australiano, John Howard y al ex presidente de Yugoslavia Slodoban Milosevic.
DECISION FINAL
El Premio Nobel de cada una de las modalidades se da a conocer apenas unos minutos después de que los encargados de las deliberaciones hayan tomado su decisión final.
El espíritu que guía el fallo responde a la voluntad de Alfred Nobel, que en 1895 publicó un testamento en el que dedicaba los intereses extraídos de su capital, guardado en un fondo seguro, a galardonar a las personas que «durante el año precedente hayan ofrecido los mayores beneficios en su forma de actuar» a la Humanidad.
A pesar de que Alfred Nobel aludía en principio al «año precedente», algunos premios como el de Física se conceden a menudo muchos años después de los méritos del galardonado.De hecho, el premio de Física de 2003 fue a parar a los rusos Alexei Abrikosov y Vitaly Ginzburg por trabajos realizados en los cincuenta, y a Anthony Legget por su trabajo en los setenta en superconductores y superfluidos.
El premio de Física de 2001 fue una especie de excepción, ya que recayó en un trabajo realizado a mediados de los noventa. La Química muestra tendencias similares, así como el resto de los premios de ciencias.
Fte E.Press