Itongadol/AJN.- A pesar de la ascendencia judía de sus padres, Nicholas Winton fue bautizado al nacer, en 1909.
Pero a los 26 años, tras la aprobación de las Leyes de Núremberg, se dio cuenta de que si su familia se hubiera quedado en Alemania, habría sido maltratado sin piedad.
En sus viajes de negocios como agente de bolsa, Winton fue testigo de la creciente violencia de los nazis contra los judíos y de su maquinaria de propaganda.
Antes de la Navidad de 1938, su amigo Martin Blake le pidió que cancelara un viaje para esquiar en Suiza para ayudar en Praga al Comité Británico para Refugiados de Checoslovaquia (CBRC), en el marco de las flamantes leyes inmigratorias que permitían la llegada de niños judíos de Alemania y Austria.
Winton se centró en los Sudetes, regresó a Londres con cientos de fotos y detalles de unos 5.000 chicos (con uno de ellos en la foto) cuyos padres querían salvar de la inminente invasión nazi y creó la “Sección de Niños” de la BRCRC, para la cual utilizó su propia oficina.
Si bien seguía trabajando como agente de bolsa, trabajó fervientemente en una campaña de recaudación de fondos para su plan de rescate porque necesitaba unos 3.500 dólares de hoy por niño como garantía de una eventual repatriación a Checoslovaquia.
Winton suplicó que todo el mundo les abriera sus fronteras, pero solo obtuvo el permiso de Suecia y Gran Bretaña.
Los primeros 20 chicos llegaron a Inglaterra el 14 de marzo de 1939, un día antes de que Hitler invadiera Checoslovaquia.
En ocho meses Winton organizó sendos transportes: uno por avión y el resto en tren, y otro estaba preparado para el 1º de septiembre de 1939, pero ese día Alemania invadió Polonia y no partió; se cree que ninguno de esos 250 niños sobrevivió a la Shoá.
Con el estallido de la guerra su proyecto de rescate se detuvo pues él se enroló en la Real Fuerza Aérea británica y perdió el rastro de la mayoría de los chicos rescatados, pero “dondequiera que estuvieran, tenía buenas razones para suponer que estaban a salvo y bien cuidados”, declaró en su momento.