El ataque tuvo lugar cerca del puesto de control de Kalandia, entre Jerusalén y la ciudad cisjordana de Ramala, y fue reivindicado por las Brigadas de los Mártires de al-Aksa, brazo armado del movimiento nacionalista de al-Fatah.
Fahima afirmó el pasado mes de mayo ante las cámaras que había viajada hasta la ciudad cisjordana de Jenín a fin de hacer de «escudo humano» para el jefe de las Brigadas de los Mártires de al-Aksa en esa localidad.
También es sospechosa de haber entrado en áreas bajo control de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) sin el permiso que requieren las autoridades israelíes para ciudadanos israelíes.
Fte EFE