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En un esperado informe especial publicado hoy, el auditor estatal Micha Lindenstrauss criticó el modo en el que tanto el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, como el ministro de defensa, Ehud Barak, tomaron decisiones en el operativo de la flotilla de mayo del 2010.
El reporte critica duramente el proceso de toma de decisión de los niveles políticos, particularmente de Netanyahu, en las semanas y días que procedieron inmediatamente la llegada de la flotilla a las aguas israelíes y las calificó como “no sistemáticas”.
Seis barcos de la flotilla intentaron navegar a Gaza en mayo del 2010, rompiendo el bloqueo naval de Israel sobre la franja controlada por Hamas. Cerca de 600 manifestantes navegaban en el buque principal, el MV Mavi Marmara, propiedad del grupo islámico turco vinculado con Hamas IHH.
La Fuerza de Defensa de Israel tomó control del barco el 31 de mayo del 2010 pero se encontró con una fuerte violencia a bordo. Como resultado de este choque hubo seis muertos y nueve comandantes y 55 personas heridas.El incidente dañó severamente las relaciones entre Israel y Turquía y causó una ola de condena internacional al manejo israelí sobre el asunto.
El informe incluye un capítulo especial sobre las fallas en la diplomacia pública y en las relaciones públicas tanto durante como inmediatamente después del incidente de la flotilla, el cual causó un daño considerable a la imagen internacional de Israel. También se distribuyó de manera separada un capítulo sobre las supuestas fallas de inteligencia luego de la llegada de la flotilla.
Lindenstrauss dijo que el proceso de toma de decisiones encabezado por Netanyahu en los eventos del incidente de la flotilla no estuvo ni coordinado ni documentado, en su mayor parte, a pesar del hecho de que altos líderes políticos y de defensa habían reconocido más temprano en el 2010 que el Mavi Marmara sería “excepcional” en comparación con flotillas anteriores.
En el operativo al buque, el primer ministro no instruyó que haya una política integrada para lidiar adecuadamente con el barco de protesta, dijo Lindenstrauss, sino que mantuvo encuentros individuales con Barak y el ministro de relaciones exteriores, Avigdor Lieberman. Según el reporte estas reuniones no fueron documentadas.
El auditor estatal también criticó a Netanyahu por esperar hasta el 26 de mayo del 2010 antes de encontrarse con ministros relevantes para revisar la estrategia y políticas sobre la flotilla y para desarrollar un intento coordenado de evitar que ésta navegue, así también para preparar una posible intervención naval.