(EFE).- El Gobierno israelí ha alcanzado hoy domingo un compromiso político para poder aprobar la retirada de Gaza, tras una maratón de negociaciones que el viernes llevó a la destitución de dos ministros ultraderechistas.
Fuentes de la Oficina del primer ministro, Ariel Sharón, informaron de que los ministros del bloque nacionalista Likud han llegado a un acuerdo sobre la aplicación del plan de retirada, que en estos momentos cuenta con 14 votos a favor y 7 en contra.
La nueva formula, según informó en exclusiva la radio pública israelí, ha decantado la votación al convencer a los ministros de Finanzas, Benjamín Netanyahu, de Exteriores, Silván Shalom, y de Educación, Limor Livnat, de que voten a favor de la iniciativa de Sharón.
Ello ha sido posible tras la retirada del texto de cualquier referencia o mención sobre la evacuación de asentamientos judíos en el futuro, compromiso que por el contrario Sharón hará de forma pública, en una declaración separada y con vistas a frenar cualquier crítica de parte de EEUU o Egipto.
El nuevo «plan de desconexión de los palestinos» llevará a un proceso de varios meses en los que el Ejército y los distintos Ministerios prepararán la retirada militar de Gaza, y sólo en marzo de 2005, cuando estén listos los planes, el Gobierno votará sobre la evacuación de las primeras colonias.
Estipula también que no habrá más construcción ni inversión pública en los asentamientos judíos de Gaza, si bien el Gobierno seguirá preocupándose de las «necesidades rutinarias de la población y de los municipios».
La gestiones para resolver la que es la peor crisis del segundo gobierno de Sharón han estado a cargo de la ministra de Inmigración, Tzipi Livni, quien el domingo pasado se lanzó a una campaña para impedir un proceso que acabase en elecciones anticipadas.
«La ministra lo que ha tratado en todo momento es de impedir una crisis irreversible en el Likud y elecciones anticipadas», dijo a EFE uno de los asesores personales de Livni.
Sobre la destitución el viernes de los ministros Avigdor Liberman y Beni Elón, de la Unión Nacional-Israel Betenu, el asesor político aseguró que Livni «de cualquier manera ve de forma muy favorable un gobierno de coalición nacional con los laboristas, en lugar de la alianza de hasta ahora con la extrema derecha».
La participación de Liberman y Elon en la reunión de hoy del Consejo de Ministros estuvo en duda hasta último momento, pendiente de una decisión del asesor jurídico del Gobierno, Menahem Mazuz, sobre su legalidad.
Ello debido a que Sharón los destituyó con el objetivo explícito de que hoy no pudieran participar en la votación del plan de retirada, y justo con las 48 horas de antelación que marca la ley para que entrase en vigor antes de la votación.
Elon incluso desapareció todo el fin de semana para no recibir la carta de destitución y romper ese plazo de tiempo.
Si bien aún faltan por definir tres recursos privados presentados al Tribunal Supremo contra las destituciones, Mazuz sentenció que las cartas enviadas por Sharón son válidas desde el viernes por la mañana, cuando la prensa las divulgó a los cuatro vientos y el propio Elon reconoció a uno de los medios locales que conocía los esfuerzos del primer ministro por encontrarlo.
«Aceptó la decisión del asesor jurídico, aunque no va pasar mucho tiempo hasta que vuelva a plena ocupación, esta vez para conseguir un cambio de gobierno», subrayó Elón, ministro de Turismo, al salir esta tarde de la sede del Gobierno.
Los debates en el Consejo de Ministros para aprobar el plan de retirada de Gaza, siguen esta tarde a pesar de que la Corte Suprema ha sugerido posponerlo hasta el martes, cuando la validez de las destituciones sean indiscutibles.
Pero Sharón rechazó la «sugerencia» e instó a la máxima instancia judicial de Israel a que extienda una orden preventiva, porque de otra manera la votación será hoy.
El primer ministro también tuvo que lidiar en la sesión de hoy con los representantes del partido Shinui (Cambio) en el Gobierno, que se retiraron del debate al conocer que el nuevo plan no contenía ninguna fecha para su aplicación.
Sólo una mención que hará Sharón en su declaración sobre que la retirada comenzará en marzo de 2005, convenció a los ministros de Shinui de volver al debate y votar a favor del conocido como «plan enmendado de separación de los palestinos».