La reunión entre Abbas y Netanyahu contará con la mediación de la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, y tendrá como anfitrión al presidente egipcio, Hosni Mubarak, que mantendrá reuniones bilaterales por la mañana con los dos mandatarios y con la responsable de la diplomacia norteamericana.
Luego de las reuniones bilaterales se celebrará el encuentro entre Netanyahu, Abbas y Clinton, ya en el marco del diálogo directo entre palestinos e israelíes.
Finalizada la reunión, el enviado especial de Estados Unidos para Medio Oriente, George Mitchell, que también se desplazará a Sharm el Sheij, ofrecerá una conferencia de prensa.
Las conversaciones continuarán el miércoles, en Jerusalem, aunque la información aún no fue confirmada.
Durante la reunión en la capital israelí, está previsto que se fije la fecha de la siguiente sesión del diálogo que sería fijada para el próximo 22 de septiembre en Nueva York.
Una de las exigencias de los palestinos para continuar con las negociaciones es que sea extendida la actual moratoria de diez meses en la construcción en Cisjordania, que concluye el 26 de septiembre.
El jefe negociador palestino, Saeb Erekat, dijo al periódico estatal egipcio Al Ahram que "la congelación de los asentamientos es un compromiso adquirido por Israel y es lo que pidió el presidente estadounidense, Barack Obama".
A la reunión de mañana, Netanyahu viajará con la idea de aplicar un congelamiento parcial de las construcciones tal como ocurrió durante la destión de Ehud Olmert, cuando 2007 llegó a un arreglo con la administración de George Bush para limitar las construcciones de los asentamientos judíos en Cisjordania.
Este acuerdo permitió que Israel no limitase su construcción en barrios judíos del Este de Jerusalem, pero establecía que no construiría en barrios árabes.
En cuanto a la exigencia de Netanyahu para que los palestinos reconozcan a Israel como el Estado del pueblo judío, Erakat respondió: "Israel no tiene derecho a pedirnos el reconocimiento del judaísmo del Estado (israelí)".