Adolf Hitler era antisemita en parte por su creencia de que un doctor judío había envenenado a su madre, según narra un nuevo libro de Joachim Riecker.
Durante una entrevista citada por el diario israelí Ynetnews, Riecker sostiene que el –en ese entonces- futuro dictador creía que su madre, Klara Hitler, quien murió de cáncer de mama a los 47 años, había sido envenenada por su doctor, llamado Eduard Bloch.
El médico trataba a la madre de Hitler con iodoformo, una práctica médica usada para evitar la muerte en esa época.
Riecker sostiene en su libro que Hitler nunca perdonó al doctor judío.
Los argumentos de la publicación, titulada “9 de noviembre: Como la Primera Guerra Mundial llevó al Holocausto”, contradice otras versiones que sostenían que Hitler respetó y estimó al Dr Bloch, e incluso lo ayudó a emigrar de Austria a Estados Unidos en 1940.
El autor hace hincapié en el 9 de noviembre como una fecha clave para Hitler desde aquel día en 1918, en el que se formó la República de Weimar. Esta conjetura la realiza porque en esa fecha durante 1923, Hitler realizó un intento de golpe de Estado, y un 9 de noviembre de 1938, ocurrió La noche de los cristales rotos, un cruento asesinato perpetrado contra la población judía.
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