“Un agradecimiento a todos los que permanecieron acá, en el acto, a pesar de los incidentes, porque vamos a seguir demostrando, frente aquellos, quizás grupos minúsculos, que prefieren vivir en la violencia y con las amenazas, para demostrarles que nosotros estamos por la convivencia, por el pluralismo y fundamentalmente por la democracia, gracias a todos”. Con estas palabras Aldo Donzis, el presidente de
Este agradecimiento pronunciado cerca de las 18.30 horas de ayer domingo 17 de mayo, fue el corolario de una tarde muy especial porque algo menos de 3 horas antes, cuando unas 1.500 personas se encontraban disfrutando de un espectáculo artístico, un grupo de inadaptados lo interrumpió desde el sector que da a la calle Perú con pancartas, folletos y gritos contrarios al Estado de Israel a la vez que pegaban con palos a quienes quisieron hacerlos callar.
Ante la inesperada agresión algunos jóvenes, y otros no tanto, intentaron repeler el ataque sin que los pocos efectivos policiales, apostados en la cercanía del escenario, intervinieran.
Al notar los atacantes que quienes los rechazaban los superaban en número, comenzaron a escapar corriendo por
Estos incidentes interrumpieron el acto y obligó a la custodia del embajador Daniel Gazit a retirarlo del lugar que ocupaba frente al escenario, mientras que el presidente de DAIA, Aldo Donzis, en el lugar, Julio Schlosser, secretario general de AMIA y Carlos Frauman, presidente de
Sabemos que tanto Aldo Donzis como Julio Schlosser, se comunicaron telefónicamente con el ministro de Justicia, Aníbal Fernández para recriminarle la pasividad inicial de los policías. Horas después respondió por medio de un comunicado que rechazaba las acusaciones que le fueron realizadas, pero que resultaron evidentes para todos los que estaban en el sector de la calzada en donde se produjo el enfrentamiento.
Cuando se reanudó el espectáculo una gran cantidad de gente se acercó al lugar permaneciendo hasta que el acto finalizó, llegaron varias autoridades policiales y efectivos antimotines.
¿Por qué no estuvieron antes?, es un interrogante que por el momento no tiene respuesta. Como era de esperar los comentarios e interpretaciones de lo ocurrido fueron muchos, desde la opinión de Julio Schlosser de que se había dejado la zona “liberada”, hasta el de un miembro del gabinete ministerial del Gobierno de
También escuchamos a uno de los responsables de la organización de este evento decir que al iniciarse el incidente le solicitó a uno de los policías uniformados que intervinieran para evitar los palazos y que en lugar de hacerlo le contestaron que si quería que lo hiciera él. Esto también se lo relató a uno de los comisarios que se hizo presente luego de los disturbios.
Otra de las interpretaciones que hacían varios periodistas que se acercaron al lugar cuando se enteraron de los incidentes, era que a menos de 45 días de las elecciones al oficialismo no le convenía para nada una agresión como la ocurrida, y que por lo tanto era un “pase de facturas” en su contra, de algún sector disconforme por no haber sido incluido en las listas electorales.
De acuerdo a los volantes que quedaron esparcidos en la calle, los atacantes se identificaban como integrantes del Frente de Acción Revolucionaria, una agrupación que se define como marxista-leninista y defensora del proletariado explotado por el imperialismo.
Según los responsables del Gobierno de