Según informa la radio pública, el Ejército responderá «pronto» al atentado, y de hecho en la reunión de esta mañana ya se formularon «planes iniciales» para una operación de castigo. Se espera que en las próximas horas, el general Mofaz entregue estos planes al primer ministro, Ariel Sharon.
Cinco personas murieron ayer tiroteadas, entre ellas dos niños, y otras tres resultaron heridas cuando un terrorista palestino consiguió infiltrarse en la citada comunidad agrícola. El ataque fue reivindicado por las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, dependientes del movimiento Al Fatá del presidente palestino, Yasir Arafat.