En este sentido se han expresado varios dirigentes del organismo panárabe tras la inauguración de su XIX Cumbre en Riad, donde también han llamado a la reactivación del diálogo en la zona el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y el jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Javier Solana, entre otros invitados a la reunión.
Los participantes, incluido el primer ministro turco Recip Tayip Erdogan, han coincidido sobre la necesidad de que todas las partes cooperen para solucionar los conflictos, sea en Palestina, Líbano, Irak, Somalia o el de Darfur.
El ministro de Defensa israelí, Amir Peretz, exhortó a su Gobierno a aceptar la iniciativa saudí como base para un proceso negociador con palestinos y países árabes, y lamentó que el primer ministro, Ehud Olmert, no haya respondido a la iniciativa con una contra-oferta. «Tenemos que considerar la iniciativa saudí como base de negociaciones aunque haya en ella elementos que son problemáticos», dijo Peretz refiriéndose en particular al asunto de los refugiados del que dijo que «es una línea roja que no podemos cruzar y nadie en Israel lo aceptará». Pero -prosiguió- la propuesta también tiene elementos positivos con los que se puede trabajar.
El plan de la Liga Árabe
El plan que se ha ofrecido a Israel supone el reconocimiento de los 22 países del organismo al Estado de Israel a cambio de la retirada total israelí de los territorios árabes ocupados por ese país durante de la guerra de los Seis Días de 1967.
La propuesta también exige la creación de un Estado palestino independiente con su capital en Jerusalén este, al lado del israelí, y una solución justa, negociada y basada en la resolución 194 de la ONU al problema de millones de refugiados palestinos.
Israel ha exigido que los árabes enmienden la oferta en lo que se refiere a los puntos sobre «el derecho de retorno» de los refugiados y el estatus final de Jerusalén oriental. «Israel nos pide enmendar la iniciativa y les pedimos que la acepten primero y vengan a las negociaciones y a ver si conseguimos una solución aceptable para todos», ha declarado Musa y ha insistido en que los árabes «estamos dispuestos a la paz». Ha advertido de que la negativa israelí «no sólo anula la propuesta sino también impide el logro de la paz».
Establecimiento de un Estado palestino
En un discurso inaugural de la cumbre, el monarca saudí apoyó el plan propuesto a Israel, pero también hizo énfasis en la unión de fuerzas de los países árabes. Ha lamentado la falta de actividad de la Liga en las crisis de Oriente Próximo y ha pedido que los dirigentes se olviden de sus divergencias e intenten obtener la confianza de sus pueblos.
«¿Qué es lo que hemos conseguido desde la creación de la Liga hace más de 60 años?», se ha preguntado el rey Abdala, cuyo país ha recibido este miércoles la presidencia de turno del organismo panárabe.
La cumbre de Riad, que durará dos días, con la presencia de 16 de los 22 jefes de Estado de la Liga Árabe, tiene entre los temas incluidos en su agenda reiterar el apoyo árabe a la iniciativa que aprobaron por primera vez en 2002.