Después de cuatro semanas de movilizarse entre los refugios y alegrar la estadía y la vida en ellos, regresan los artistas a la rutina. El número de artistas asignados a levantar la moral de las personas y de los soldados que se encontraban en el Norte ascendió a 714 y se presentaron en casi 216 poblados.
El éxito fue único en su tipo, y entre los artistas voluntarios se encontraban actores de cine y teatro, magos, mimos, poetas y cuentistas, cantores y bailarines, que actuaron frente a 180.000 personas. «Cuando formamos el comando de emergencia de cultura, no sabíamos bien adonde llegaríamos, ya que no teníamos idea de que tantos miles de habitantes se verían forzados a pasar tanto tiempo en los refugios», dijo Eliézer Shturem, el jefe de la Federación de Cultura para el pueblo; la gran entrega de los artistas al público nos llena de orgullo y satisfacción. Mirando retrospectivamente la respuesta obtenida y el trabajo realizado días y noches para apoyar a la gente en la crisis que nos estaba enfrentando, no tengo la menor duda que estábamos ante una gran prueba».
Llevar a cabo esta acción demandó un costo de 2 millones de shekels, dinero que fue extraído del Fondo de Cultura y Arte para el pueblo. El Ministro de Cultura Ofir Paz Pines dijo hoy: «Los artistas y hombres de la cultura demostraron hasta donde estan ligados al público israelí. Cientos de artistas que fueron voluntarios para llegar al Norte, con sus actuaciones y sus ganas de colaborar, fueron capaces de levantar el espíritu de aquellos habitantes que se vieron forzados a permanecer en los refugios. No hay otros que pudieran haber hecho este trabajo con tanto éxito y cumplir con el objetivo. A ellos nuestro mayor agradecimiento!»
Graciela Kahan