El presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasir Arafat ha condenado hoy la última operación militar israelí en la ciudad cisjordana de Nablús, y las amenazas de expulsión de los palestinos hacia la franja de Gaza.
«Lo que está ocurriendo en Nablús es un crimen ante el que no podemos permanecer callados. Apelo a las Naciones Unidas y al Consejo de Seguridad a actuar con urgencia antes de que la situación se deteriore», ha declarado Arafat.
El ejército israelí, con un centenar de carros de combate y vehículos blindados, volvió a ocupar Nablús el jueves por la noche, y desde entonces se ha dedicado a buscar activistas palestinos en el casco viejo de la ciudad.
Además, Arafat ha calificado la expulsión de Palestinos de Cisjordania como «uno de los numerosos crímenes contra el pueblo palestino», al tiempo que se ha interrogado acerca de la legalidad de semejante medida a la luz del derecho internacional.
Una comisión militar de apelación israelí debe pronunciarse mañana sobre la expulsión a Gaza de dos palestinos, hermanos de activistas. Israel considera que esta medida ayudará a luchar contra los atentados.
Los dos hermanos apelaron ante la comisión y podran recurrir en última instancia ante el Tribunal Supremo israelí.
Fte El Pais