«No podemos estar satisfechos ante la impunidad reinante en nuestro país, de la cual nuestra causa es un ejemplo paradigmático», dijo el presidente de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas, DAIA, José Hercman.
Centenares de personas recordaron el octavo aniversario del atentado.
Tras ocho años de proceso judicial, contenido en un voluminoso expediente, y detenidos los presuntos autores materiales del atentado, aún no se han establecido las responsabilidades del ataque contra la principal, organización judía del país.
«Pese a los gobiernos, a las maniobras y al tiempo transcurrido, jamás renunciaremos a nuestro reclamo de justicia», dijo en su discurso el presidente de la AMIA, Abraham Kaul.
Políticos en el banquillo
En representación de los familiares de los muertos habló Sofía Gutermann, quien acusó al presidente Eduardo Duhalde y al ex presidente Carlos Menem, entre otros funcionarios, de obstaculizar deliberadamente el avance de las investigaciones.
Sus críticas también estuvieron dirigidas a Fernando de la Rúa, el mandatario que renunció a finales de 2001 y a la dirigente opositora Elisa Carrió, posible aspirante a la presidencia por la izquierdista ARI.
En su reclamo por lo que considera la ineficiencia y la complicidad de los políticos en su causa, Sofía Guterman se sumó al reclamo de «que se vayan todos», promovido principalmente por los sindicatos y los opositores de izquierda.
«Necesitamos un cacerolazo contra el terrorismo ¿proclamó-, contra la impunidad y contra el encubrimiento».