Itongadol/AJN.- Mientras en algunas partes del mundo se escuchan ciertas e infructuosas voces que instan a la Selección Argentina de fútbol a no jugar el partido amistoso del sábado frente a Israel, en su capital, Jerusalem, lo cierto es que ello jamás podría ocurrir por numerosos motivos que hacen a las relaciones bilaterales entre ambas naciones y federaciones, pero también a que el capitán de la blanquiceleste, Lionel Messi [foto], es embajador de una empresa de desarrollo tecnológico de ese país, que celebra 70 años de moderna independencia.
Se trata de Sirin Labs, que creó un teléfono celular ultraseguro con registros de computadora llamados “bloqueadores”, que están vinculados y asegurados mediante criptografía.
“Estamos entusiasmados de tener al mejor jugador del mundo; juntos patearemos algunos objetivos y llevaremos la tecnología ‘blockchain’ al mercado masivo”, tuiteó a principios de año Moshe Hogeg, cofundador y titular de la firma, con Tal Cohen.
El centro de investigación y desarrollo de Sirin Labs está en Tel Aviv, pero la compañía se expandió a nivel mundial, con sede central en Suiza y una filial en Londres.
Messi ya estuvo en Israel en agosto de 2013, en una “gira de paz” del Barcelona, y en esa ocasión se reunió con líderes locales y visitó el Muro Occidental, mal llamado “de los Lamentos”, en Jerusalem.
El mes anterior le había enviado un mensaje al equipo argentino que competiría en las Macabeadas, una especie de Juegos Olímpicos para deportistas judíos que se hace en su Estado, y un año después, apoyó un partido de fútbol organizado por el papa Francisco para promover la convivencia entre israelíes y palestinos, que no pudo jugar por una lesión.