Itongadol.- Este no es un año escolar más para la Escuela Comunitaria Arlene Fern.
El 2018 será un año en el que los ladrillos se convertirán en nuevos espacios educativos: la escuela inaugurará un nuevo comedor y estrenará un gimnasio cubierto. Ambos entornos permitirán a nuestros alumnos disfrutar de la experiencia escolar en lugares pensados especialmente para optimizar sus vivencias diarias.
Este es un año en el que los paneles se transformarán en paredes interactivas, en el que nuestros alumnos podrán intervenir y dialogar directamente con la arquitectura escolar para transformarla, rediseñarla, en fin, mejorarla.
Interpelaremos cada uno de nuestros rincones para fortalecer aquello que sucede en cada uno de los microespacios escolares. Porque sabemos que para repensar la enseñanza es necesario también repensar los ambientes.
Por eso estamos convencidos de que toda obra edilicia es, esencialmente, una excelente oportunidad de reconstrucción pedagógica, que nos invita a problematizar e interrogarnos acerca de nuestras aulas, pasillos y patios.
Este es un año en el que vamos a vivir juntos una escuela en transformación y una comunidad en movimiento, en el marco de un proyecto de excelencia para todos. Será sin dudas un proceso de edificación muy gratificante y enriquecedor para todos nuestros alumnos, docentes y familias.