Itongadol/AJN.- En la conversación que mantuvo anoche el primer ministro Binyamin Netanyahu con el presidente de Francia, François Hollande, reiteró su voluntad de reunirse con el presidente de la Autoridad Palestina “en cualquier momento y lugar” y sostener “conversaciones directas sin condiciones previas”. Netanyahu insistió también en que Israel no participará en la conferencia internacional de paz convocada por Francia, ya que “no contribuirá a la paz”, tal como lo anunciara el gobierno israelí formalmente.
Una alta fuente palestina citada por Radio Kol Israel expresó que sería “un error estratégico por parte de Israel no participar en la conferencia internacional de paz que convoca Francia para dentro de dos semanas”.
Según este funcionario palestino, la respuesta israelí “es una invitación a los extremistas a actuar y utilizar la negativa israelí para demostrar que la violencia es el único camino”. Además, aclara que, si Israel no participa en la conferencia, tampoco habrá reunión entre Binyamin Netanyahu y Abu Mazen. “Aceptamos reunirnos con Netanyahu en dos ocasiones, una en Moscú y ahora en París, pero el primer ministro israelí rechaza todo intento de encontrarnos. Cuál es la gran cosa, se trata nada más que de una reunión, no de negociaciones”, agrega.
Otro funcionario palestino, cercano a Abu Mazen, asegura que “al negarse a participar en la Conferencia de París, Israel optó por los colonos y no por la paz”. De todos modos, advierte, “esta conferencia internacional es suficientemente importante y se llevará a cabo con o sin Israel”.
De todas maneras, en Ramallah temen que la ausencia de Israel provoque la suspensión de la conferencia o a que los países invitados envíen representantes de un rango poco importante. La semana próxima, una delegación de representantes palestinos – encabezada por el secretario general del Comité Ejecutivo de la OLP, Saeb Erekat – realizará un viaje de varios días a Estados Unidos. Entre otras cosas, el objetivo de este viaje es intentar averiguar qué rango de representación enviará Estados Unidos a la conferencia, debido a que, si Israel y Estados Unidos se ausentan, la convocatoria estará destinada al fracaso.