Itongadol/AJN.- PrimeSense, la empresa fundada por Michael Shpigelmacher, Aviad Maizels y Alex Shpunt, fue adquirida en 2013 por Apple por unos 400 millones de dólares. Fue un líder mundial en sensores 3D que ayudó a impulsar Microsoft Kinect para Xbox 360 y proporcionó la tecnología detrás del Face ID de Apple.
Bionaut Labs, la startup médica fundada por el trío, ahora tiene objetivos muy diferentes: ir hacia los rincones más profundos del cerebro humano.
La compañía está probando su tecnología en una instalación de Mayo Clinic y está lista para comenzar ensayos clínicos con cinco centros médicos estadounidenses de primer nivel mientras solicita la aprobación de la FDA.
El Bionaut de la compañía, un diminuto micro-robot más pequeño que un grano de arroz, es guiado a través del sistema nervioso central de un paciente hacia un punto específico en el cerebro donde puede realizar una cirugía menor, administrar medicamentos terapéuticos o regresar con tejido para una biopsia.
Shpigelmacher, director ejecutivo de Bionaut Labs, dice que se dio cuenta de que los tratamientos para las enfermedades que ocurren en un punto específico del cuerpo, especialmente el cerebro, no estaban siendo dirigidos con precisión.
Él compara el efecto de los tratamientos existentes con «bombardear el cuerpo de un paciente con drogas», creando «efectos secundarios no deseados generalizados o daños en los tejidos y órganos circundantes».
“Era como tener un plato sucio en el fregadero y sacar una manguera contra incendios que inunda toda la casa solo para lavar ese único plato”, dice.
El Bionaut, guiado por un médico que usa un poderoso imán, puede liberar una carga útil de terapia dirigida directamente a un tumor o cualquier otro objetivo localizado, incluso en lo profundo del cerebro, y luego salir del cuerpo.
“Las cirugías para llegar al cerebro tienden a ser relativamente agresivas y bastante profundas y conllevan muchos riesgos y mucho tiempo de recuperación”, dice el Dr. Bill Loudon, vicepresidente de neurociencia de Bionaut Labs. La barrera hematoencefálica crea “problemas muy importantes para intentar llevar la droga a donde queremos que llegue. Por el lado quirúrgico, es difícil llegar al cerebro y por el lado de los medicamentos, es difícil llegar a los tejidos”.
“El Bionaut tiene ventajas específicas que sortean estos problemas. Realmente representa un nivel completamente nuevo”, dice el Dr. Loudon.
La empresa ha desarrollado varios prototipos de microrobots, cada uno diseñado para un propósito diferente. Hay un Bionauta en forma de cápsula diseñado para moverse a través de fluidos, un Bionauta en forma de sacacorchos diseñado para excavar a través del tejido y un Bionauta de punta afilada que puede realizar una microcirugía cortando el tipo de quiste en el cerebro que causa hidrocefalia.
“Minimizamos la penetración en los tejidos, haciéndolo solo en la distancia más segura y más corta posible. Abre una forma completamente nueva de tratar enfermedades cerebrales”, dice Shpigelmacher.