Itongadol.- El Instituto Hadassah de Investigación Oncológica (HCRI) logró un gran avance en la atención personalizada del cáncer: el desarrollo de un modelo de incrustación neuronal que utiliza el aprendizaje automático, un tipo de inteligencia artificial (IA), así como el procesamiento del lenguaje natural (PLN), para detectar firmas mutacionales dominantes en paneles de genes específicos utilizando sólo unas pocas mutaciones, lo que lo hace ideal para el uso clínico cotidiano.
La investigación que dio lugar al nuevo modelo, denominado MESiCA por ‘‘mutational embeddings for signatures identification in clinical assays’’ (incrustación mutacional para la identificación de firmas en ensayos clínicos), fue anunciada y publicada en la revista Cell Reports Medicine.
El director del HCRI, Dr. Michal Lotem, expresó que ‘‘MESiCA representa un gran paso adelante en la medicina personalizada’’.
‘‘Este modelo innovador ofrece una herramienta práctica para los oncólogos, permitiéndoles tomar decisiones más informadas, lo que en última instancia conduce a mejores resultados para los pacientes’’, agregó Lotem.
El HCRI es la rama de investigación transitoria en oncología de la Organización Médica Hadassah, un sistema hospitalario de enseñanza e investigación líder en Jerusalem y presente en diferentes países del mundo.
Liberar el potencial de las firmas mutacionales
El desarrollo del cáncer se ve impulsado por mutaciones en el ADN que dejan tras de sí las llamadas firmas mutacionales, es decir, patrones únicos que actúan como huellas dactilares y revelan las causas subyacentes del cáncer.
Algunas de estas huellas tienen implicaciones clínicas para los planes de tratamiento. Tradicionalmente, la identificación de estas firmas exigió el análisis de una enorme cantidad de datos, en ocasiones superior a la disponible en los entornos clínicos rutinarios.
El director del Instituto de Oncología Sharett de Hadassah, que trabaja en colaboración con el HCRI, Dr. Aron Popovtzer, explicó: ‘‘Los métodos actuales se basan en pruebas de paneles de genes específicos, que sólo analizan una pequeña parte del genoma’’.
‘‘Esta limitación obstaculizó nuestra capacidad para detectar firmas mutacionales y aplicar esta información para personalizar los planes de tratamiento’’, añadió Popovtzer.
Por su parte, el Dr. Shai Rosenberg, neuro oncólogo jefe del Laboratorio de Biología Computacional del Cáncer de Hadassah e investigador principal del estudio, afirmó: ‘‘MESiCA fue validado en más de 60.000 muestras de cáncer, revelando firmas cruciales vinculadas a mejores tasas de supervivencia y respuestas al tratamiento’’.
En la misma línea, el autor principal del estudio, Dr. Adar Yaacov, destacó: ‘‘Al permitir la detección de estas firmas en pruebas rutinarias, MESiCA faculta a los clínicos para prescribir planes de tratamiento personalizados más precisos, mejorando en última instancia los resultados de los pacientes’’.
Esta investigación pionera abre el camino a una nueva era de atención oncológica personalizada. Con MESiCA, el Instituto Hadassah de Investigación Oncológica sigue demostrando su compromiso con el desarrollo de soluciones innovadoras para combatir el cáncer.