Itongadol/Agencia AJN.- Israel está probando un dispositivo de tecnología médica para reducir el riesgo de padecer delirio entre los pacientes de las unidades de cuidados intensivos, incluidos los heridos durante la actual guerra contra Hamás.
La desorientación y la falta de comunicación que experimentan los pacientes mientras están hospitalizados pueden provocar delirio (pesadillas y alucinaciones), especialmente si están intubados. La tasa puede alcanzar hasta el 80 por ciento en estos pacientes.
La empresa israelí EyeControl busca evitar ese delirio. Si se pudiera eliminar o disminuir este tipo de estrés agudo, se reducirían las posibilidades de que un paciente sufra un trastorno de estrés postraumático después de salir de la terapia intensiva.
El dispositivo desarrollado por EyeControl es un auricular de plástico liviano especialmente diseñado. Originalmente se concibió como una herramienta de comunicación alternativa para algunos pacientes, como aquellos con esclerosis lateral amiotrófica avanzada (ELA).
Sin embargo, ahora su funcionalidad se está desplazando hacia mejorar y acelerar la recuperación de los pacientes de terapia intensiva. Con este fin, el producto se está sometiendo a pruebas en el Centro Médico Beilinson en Petah Tikva y en el Hospital Universitario Samson Assuta en Ashdod. Pronto comenzará un tercer ensayo en un importante hospital de Boston.
“Cuando decidimos cambiar la funcionalidad del dispositivo, iniciamos el estudio aquí en Israel hace un año y medio con 30 pacientes en la Unidad de Cuidados Intensivos de Assuta y 45 en Beilinson”, dijo el especialista en productos Eye Control, Michal Finkelstein, quien coordina el estudio en Assuta.
“Pero cuando comenzó la guerra, en Assuta decidimos que lo correcto y compasivo sería garantizar que los heridos de guerra no terminaran en el grupo de control y, por lo tanto, obtuvieran el beneficio completo del producto”, explicó Finkelstein.
Los auriculares EyeControl tienen tres partes principales: una cámara infrarroja que sigue el ojo, un auricular de conducción ósea y una plataforma basada en la nube que se conecta y controla los auriculares desde cualquier lugar a través de Wi-Fi. También hay una pequeña caja de control que se puede conectar a la cama del paciente con botones para controlar la potencia y el volumen.
Los pacientes llevan puestos los auriculares casi todo el día y la noche, pero no siempre transmiten el sonido. Cuando lo hace, reproduce grabaciones de las voces de familiares y amigos, su música favorita y mensajes de orientación, que implica la mención de fecha y hora, y un recordatorio de que el paciente está en un hospital.