AJN/Itongadol.- Durante mucho tiempo han estado circulando rumores en todo el mundo de que el líder ruso, Vladimir Putin, «sufre una enfermedad terminal».
A lo largo de los años, el tirano de 69 años ha creado una apariencia dura para sí mismo, que ha irradiado fuerza y poder al resto del mundo. Ahora, un experto en lenguaje corporal ha examinado los movimientos de Putin en comparación con días pasados y confirma completamente el debilitamiento.
Durante la reunión oficial de Putin con el presidente de Tayikistán, Emomali Rahmon, que tuvo lugar en Moscú, se pudieron ver gestos inusuales.
El profesor Erik Bucy, experto en lenguaje corporal de la Universidad de Texas, señaló que Putin se movía en su silla de una manera que no le convenía.
Sacudía su pierna izquierda sin cesar y sin poder controlarla, y cuando terminó se sentía molesto al mover su pierna derecha.
Al mismo tiempo, Putin también sostuvo su mano en la silla en la que estaba sentado y parecía estar más débil que nunca.
Si uno se remite a la ola de rumores sobre su estado de salud y algunos informes de que padece cáncer, se puede aprender mucho sobre el líder ruso.
El profesor Bucy expresó su opinión profesional y argumentó que Putin ya no era tan fuerte como lo había sido en el pasado e incluso señaló que el deterioro fue rápido.
“Está increíblemente débil en comparación con la persona que conocimos hace solo unos meses. Se lo ve encogido y no se mueve libremente, y la hinchazón en su rostro también puede indicar alguna enfermedad que lo complica”, dijo el experto.
Paralelamente, Suecia y Finlandia entregaron este miércoles sus respectivas solicitudes de ingreso en la OTAN.
«En Suecia y Finlandia también estamos de acuerdo en ir de la mano en todo este proceso y mañana presentaremos juntos la solicitud», expresó este martes la primera ministra sueca, Magdalena Andersson una conferencia de prensa conjunta con el presidente finlandés Sauli Niinisto en la capital sueca.
El Parlamento finlandés aprobó el martes por abrumadora mayoría una propuesta para solicitar el ingreso en la alianza militar de la OTAN, en un cambio de política histórico provocado por la invasión rusa a Ucrania.
Niinisto y el gobierno decidieron oficialmente el domingo que Finlandia solicitaría el ingreso, pero la decisión estaba pendiente de la aprobación del parlamento.
De los 200 legisladores, 188 votaron a favor y ocho en contra de la solicitud, dijo el presidente del Parlamento, Matti Vanhanen.
El ministro de Asuntos Exteriores de Finlandia, Pekka Haavisto, afirmó que la decisión no era motivo de celebración porque «hay guerra en Europa».
«La pertenencia de Finlandia a la OTAN no cambiará nuestro pensamiento básico de que siempre buscaremos soluciones pacíficas y somos una nación amante de la paz que buscará ante todo soluciones diplomáticas a cada conflicto», dijo Haavisto durante el debate.
Por otro lado, el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, recibirá a Andersson y Niinistö para hablar de sus solicitudes de ingreso en la OTAN, según informó el martes la Casa Blanca en un comunicado.
Además, Biden, Andersson y Niinistö, discutirán «la seguridad europea, así como el fortalecimiento de nuestras estrechas asociaciones a través de una serie de cuestiones globales y el apoyo a Ucrania», dice el comunicado.
El Kremlin advirtió que podría tomar medidas “técnico-militares” de represalia.
Dos meses y medio después de que la invasión rusa de Ucrania provocara un escalofrío de miedo entre los vecinos de Moscú, el presidente y la primera ministra de Finlandia anunciaron el jueves pasado que el país nórdico debería solicitar de inmediato su ingreso en la OTAN, el pacto de defensa militar fundado en parte para contrarrestar la Unión Soviética.
“Tú (Rusia) causaste esto. Mírate en el espejo”, dijo el presidente de Finlandia, Sauli Niinisto.
El proceso podría tardar meses en completarse.