(EFE).- Unas 9.000 cuentas abiertas en bancos judíos antes de la Segunda Guerra Mundial por israelitas europeos que se presume murieron en el Holocausto, se hayan congeladas en entidades bancarias israelíes, que se han negado a entregar las sumas a los herederos.
Se calcula que más de 200 millones de dólares pertenecientes a las víctimas del Holocausto, que fueron depositados entre las décadas de los años veinte y treinta del siglo pasado por judíos en entidades bancarias de la Palestina bajo el Mandato Británico, son retenidas por el Gobierno israelí y varios bancos.
«A diferencia de lo que sucedió en muchos Estados europeos, por ejemplo en Suiza, donde durante más de 50 años el dinero de las víctimas del Holocausto yació en cuentas dormidas, estas cuentas siguieron varios caminos que involucran a organismos del gobierno británico e israelí, antes del mandato de Palestina, y luego al estado de Israel», reza el informe.
El documento, de 75 páginas, fue elaborado por una comisión especial que ha investigado el asunto en los últimos cinco años.
«Gran parte de lo que hemos descubierto apunta a que la mayor parte de las cuentas de las víctimas de la ‘Shoah’ (Holocausto), fueron transferidas a la custodia general (de Israel) hasta mediados de los años 60, y desde entonces los datos están en sus manos», continúa el informe.
Y subraya que «en consecuencia, la responsabilidad de estos fondos recae en los bancos».
Algunos de los herederos denuncian que los bancos israelíes no han querido darles información sobre el paradero de las cuentas de sus parientes víctimas de la barbarie nazi.
Los datos del informe han salido a la luz después de que bancos en Suiza acordaran reintegrar centenares de millones de dólares y abrieran sus archivos, después de que fueran acusados de esconder y malversar fondos judíos de la época de la Segunda Guerra Mundial.
El Gobierno israelí tras conocer el documento ha manifestado que el dinero debe ser devuelto a los herederos de las víctimas judías y los nombres de los propietarios de las cuentas han sido publicados en una página web del Parlamento.
