Itongadol/AJN.- El Obispo Antoine Audo denunció que al menos dos tercios de los cristianos se vieron obligados a abandonar Siria desde que comenzara la guerra civil. Audo especificó que, en Siria había alrededor de 1,5 millones de cristianos en el país antes del inicio del conflicto en marzo de 2011. "Creo que ahora hay quizá 500.000. Dos tercios abandonaron el país principalmente debido a la inseguridad", dijo en declaraciones a la prensa en Ginebra.
En la norteña ciudad de Alepo, donde se vive el asedio, la escasez y los combates, el éxodo fue aún mayor. “Quedan casi 40.000 de lo que alguna vez fue una fuerte comunidad cristiana con 160.000 miembros”. "Nadie puede imaginar los peligros que enfrentamos todos los días", dijo el sacerdote. “Todos los cristianos ricos se han ido, mientras que las clases medias convirtieron en pobres y los pobres en miserables".
El Obispo Audo negó que el presidente Bashar Assad fuese el culpable de los horrores del conflicto en Siria, que ha costado más de 270.000 vidas en cinco años. "No hay persecución a los cristianos por parte del gobierno. En realidad, están en la mira de grupos extremistas tales como ISIS, en un intento por desestabilizar la sociedad siria y transformar el conflicto en una guerra confesional".
El religioso dijo que cree que “un 80 por ciento de los cristianos votaría por Assad si se presentara nuevamente a elecciones y que, en general, tendría un apoyo superior al 50 por ciento”. “"Incluso los sunitas lo elegirían, para alejar a los extremistas”, señaló.
El obispo dijo que Siria fue durante mucho tiempo un modelo de cómo las comunidades musulmanas y cristianas puedan vivir juntas y dijo que el odio que se vive ahora había sido "importado". "Pienso que esta guerra no viene desde dentro de Siria. Creo que todo está organizado desde el exterior para destruir el país", advirtió el Obispo Audo.