732
Itongadol/ AJN.- “Janucá se une en un símbolo con la Navidad y es el símbolo de la luz”. Así lo expresaba el Papa Francisco cuando era cardenal Jorge Bergoglio al encabezar poco tiempo antes de ser Papa, un oficio religioso en la sinagoga de la comunidad NCI-Emanu El de la Fundación Judaica con motivo de la festividad de Jánuca. La foto, tomada por la Agencia Judía de Noticias,recorrió el mundo cuando se supo de su designación en el Vaticano.
Ajn.- “Janucá se une en un símbolo con la Navidad y es el símbolo de la luz”. Así lo expresaba el Papa Francisco cuando era cardenal Jorge Bergoglio al encabezar poco tiempo antes de ser Papa, un oficio religioso en la sinagoga de la comunidad NCI-Emanu El de la Fundación Judaica del rabino Sergio Bergman con motivo de lafestividad de Jánuca cuando encendió la quinta vela. La foto, tomada por la Agencia Judía de Noticias,recorrió el mundo cuando se supo de su designación en el Vaticano.
Aquel día el entonces arzobispo de Buenos Aires y primado de Argentina, cardenal Jorge Bergoglio, destacó los lazos que unen a la fiesta de Janucá, la festividad de las luminarias.“Janucá se une en un símbolo con la Navidad y es el símbolo de la luz, ya que en el relato del nacimiento de Jesús, los ángeles anunciaban la presencia de la luz, o sea que la luz está en ambas fiesta. En el caso de Janucá tiene un significado histórico muy concreto pero también se proyecta hacia adelante y da lugar a luces propias”, explicó Bergoglio en declaraciones a la Agencia Judía de Noticias (AJN).
El cardenal aclaró en aquella oportunida, junto a los rabinos Sergio Bergman y Ale Avruj, que no es la primera vez que concurría a una sinagoga. “Es algo que suelo hacer, como los hermanos judíos vienen a nuestra casa, yo voy a la de ellos, somos hermanos. El amor nos lleva a la fraternidad”, resaltó el líder de la Iglesia Católica.
El rabino Segio Bergman había expresado que el hecho de que el cardenal haya concurrido a la sinagoga de la comunidad NCI-Emanu El y a un rezo de la noche de Janucá “abre mil puertas a la reflexión y el pensamiento y es más un mensaje profundo para que entre todos se pueda hacer que la sociedad en que vivimos, a veces tan oscura, haya un poco más de luz”.
“En lo personal siento que es el cierre de un año con un broche de oro, un año que ha sido muy intenso y muy productivo a
nivel comunitario por la cantidad de proyectos que hemos iniciado”, expresó el religioso.