Itongadol.- “El encuentro fue un paso importante que puede servir como ejemplo para lo que es posible hacer dentro del país. Estamos dialogando, estamos trabajando juntos. Queremos dar un ejemplo.” Con estas declaraciones, el Presidente de AMIA, Leonardo Jmelnitzky, sintetizó el espíritu de diálogo y fraternidad que caracterizó el encuentro que mantuvo ayer con Monseñor Jorge Eduardo López, presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social (CEPAS), y Juan Gregorio Navarro Floria, miembro de la Comisión Nacional de Justicia y Paz.
“Este encuentro se produjo en el contexto de reciprocidad que AMIA y la Comisión Episcopal de Pastoral Social vienen llevando adelante desde hace tiempo”, agregó el Presidente de AMIA. “Monseñor Lozano ya nos había recibido en diversas oportunidades para tratar diversos temas de carácter social y también temas relacionados con la espiritualidad.”
“Muchas de las problemáticas sociales que está atravesando la sociedad, y el mundo en general, tiene que ver con la pérdida de un sentido de lo humano como expresión de lo divino”, reflexionó el presidente de AMIA. “Un hombre encerrado en sí mismo, sin trascendencia, sin destino, con un vacío existencial, encerrado en el materialismo, de algún modo es un hombre que, de a poco, se tiene que ir acercando a aquellas cosas que tanto criticamos hoy. El consumismo, el sinsentido, la droga, son de algún modo respuestas a esa falta de encontrar la posibilidad de la trascendencia dentro de sí mismo”, ejemplificó. “Creo que cuando hablamos de la problemática social es muy importante referirla a esta concepción espiritual de la que hemos hablado”.
“Nos hemos reunido como hermanos, como amigos a compartir necesidades e inquietudes,” expresó Monseñor Lozano al término del encuentro. “Hemos visto la necesidad de fomentar el diálogo y de promover encuentros que tengan que ver fundamentalmente con la necesidad de colocar en agenda a los más pobres y a las necesidades que ellos tienen”.
La reunión entre AMIA y la CEPAS se enmarcó en el tradicional camino de cooperación que la comunidad católica y judía vienen recorriendo conjuntamente como manifestación de los estrechos lazos que las unen.
Al término del encuentro, Jmelnitzky y Lozano destacaron la importancia de seguir trabajando sobre una agenda temática compartida para contribuir a la reparación de las inequidades sociales más acuciantes.