La directora de marketing de la Delek Real Estate, Sarit Saban Shalit, explicó: Hay tres tipos de apartamentos lujosos: los que tiene un ático, los penthouse y los duplex. Los preferidos son los penthouse. Son más grandes que un departamento común. Se encuentran en el último piso de un edificio y cubren una superficie de 140 a 150 metros cuadrados con un balcón de 50 metros cuadrados.
«Generalmente es el departamento más grande del edificio y se vende relativamente tarde pero antes de finalizarse su construcción. El comprador tiene permitido diseñar su interior como desee».
«Incluso cuando los constructores no han podido venderlo, no se terminan los baños y la cocina. Se dejan para el final con el fin de que el futuro dueño decida a su gusto», comentó Shalit.
Los ejecutivos de la industria notaron que aumentó la demanda de los penthouse. Pero como la oferta es restringida, los precios son muy altos.
En su mayoría, los compradores son parejas que tienen hijos grandes y desean mayor lujo para sus departamentos. En lugar de una habitación para padres, se piensa en una gran ´suite´, confesó Anat Chen, consultora de marketing.
Pero, para aquellos que no puedan pagar un penthouse, los constructores ofrecen un consuelo: el mini-penthouse de 120 metros cuadrados.
Al mismo tiempo que subió la demanda, bajó la de los duplex. Resulta muy difícil en la actualidad para los dueños vender su departamento de dos pisos. Y los precios, por supuesto, bajaron.
En cambio, los que compraron un penthouse algunos años atrás, observan el aumento del valor de su departamento, que crece rápidamente.
Fuente: Haaretz
Traducción: Leila Mesyngier