Antoni Dobrowolski, el sobreviviente más anciano de Auschwitz, murió ayer domingo a la edad de 108, en la ciudad polaca de Debno, según informó hoy la prensa de ese país.
Dobrowolski, que no era judío, fue capturado por los nazis y enviado a Auschwitz porque como maestro de primaria se rebeló contra las normas implantadas por alemanes que prohibían la educación de los polacos más allá del cuarto grado y siguió dictando clases en forma clandestina.
El maestro tenía 48 años cuando fue arrestado por la Gestapo en 1942 y enviado a Auschwitz, desde donde lo trasladaron luego a Gross-Rosen y finalmente a Sachsenhausen, donde fue liberado en la primavera de 1945 por el ejército soviético muy cerca del fin de la Segunda Guerra Mundial.
Después de la guerra, se trasladó a la pequeña ciudad polaca de Debno, donde fue director de una escuela secundaria. Permaneció en Debno hasta que murió. Su funeral será el miércoles, según anunciaron los funcionarios de la ciudad.
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