El Gran Rabino de la Congregación Sefaradí Argentina, Iosef Chehebar, visitó la escuela Yeshurun Torá próximo a los Iamim Noraim. Acompañado por la Directora General, la Licenciada Laura Fainstein y por su hijo, el Rabino del colegio, Isaac Chehebar ha recorrido las aulas en plena jornada escolar, así pudo observar a los chicos de las salas de 5 años estudiando inglés, a los alumnos de 5to grado trabajando con las pizarras interactivas en clase de historia y a los varones de 1er año del nivel secundario en Lengua y Literatura.
Luego, tuvimos el honor de poder realizarle una entrevista en la cual se habló principalmente de su rol y la educación en la Argentina.
Más tarde, el Rabino compartió un almuerzo con el Equipo Directivo del Área Judaica de los 3 niveles de la escuela. Durante el mismo se interiorizó acerca de las temáticas que se están abordando y todos los proyectos del área realizados en 2012 y los que se planifican a futuro.
A continuación se agrega la entrevista al Gran Rabino Chehebar:
– ¿Cómo surge en la Argentina la educación judía ortodoxa? ¿Cuándo y dónde da inicio? Sabemos que su padre tuvo mucho que ver con esos comienzos, puede contarnos al respecto.
– En primer lugar quiero agradecer el haberme dado la oportunidad de esta entrevista. He tenido el gusto de recorrer hoy toda la escuela (el edificio del jardín y primario y también las instalaciones del secundario) y aunque estoy en contacto permanente con la tarea diaria que desarrollan, es bueno cada tanto venir a hacer una visita y poder vivenciar de cerca el trabajo cotidiano. Sinceramente los felicito, me gustó mucho lo que pude compartir porque se ve un crecimiento espléndido.
En relación con la pregunta, la historia de la comunidad en la Argentina tiene sus inicios a comienzos del siglo 20 con la llegada de los primeros inmigrantes que venían de Siria, nuestra comunidad es oriunda de Alepo.
Ya en Siria era una comunidad religiosa por ende cuando llegaron acá traían consigo esas costumbres y ese respeto a la religión. Claramente en la Argentina debían organizarse, lo que venían a buscar era un mejor pasar, una mejor vida. La posición económica no era buena y debieron empezar desde abajo como la gran mayoría de los inmigrantes y así despacio se fue organizando la comunidad. Tengo entendido que el primer Rabino fue el Jajam Shaul Siteon y que todos se nucleaban alrededor de él en la Congregación Sefaradí que fue el Templo principal.
Desde su inicio fue una comunidad religiosa que con el tiempo al insertarse en la Argentina sin las mismas posibilidades y comodidades para cumplir que había en Siria fue perdiendo las costumbres y así mucha gente dejó de respetar el Shabat o dejó de cumplir con el kasher y otras tradiciones que se fueron dejando de lado.
Y ahí sí fue cuando mi padre tuvo un rol protagónico cuando lo llaman en el año ´53, para que ejerza el cargo de gran rabino de la comunidad. Cuando vino acá se sorprendió ya que no estaba acostumbrado a que la gente no cumpliera y con mucho esfuerzo se propuso varios objetivos a largo plazo. Y en lo principal que hizo hincapié fue en la educación, a diferencia de algunos rabinos que dejan el aspecto educativo de lado y se ocupan más de la parte comunitaria.
Él entendía que eso era lo primordial, así que al principio iba a recorrer la escuela diariamente, ver a los maestros, a los alumnos…y de a poco fue recuperando todo lo perdido. Tenía metas, entendía que para avanzar debía trabajar en forma gradual y él se propuso distintos objetivos hasta que al final logró concretar la Yeshibá, el Kolel, con respeto de lo que deseaba y con las ideas claras de hacia dónde iba. Y yo sigo con la misma idea, creo que es la educación la base de la continuidad del pueblo de Israel y la continuidad de nuestra comunidad puntualmente.
– ¿Cómo definiría la evolución de esta línea de educación en nuestro país?
– Son muchas las cosas que se dan juntas en la evolución de la educación ortodoxa, no sé si uno puede enumerar todas. Lo que uno ve más a primera vista tiene que ver con la gran liberación en el mundo en general, en Argentina en particular, nuestro país siempre tuvo un Estado con un sistema bastante conservador, pero a medida que se fue modificando, que hubo un giro importante en muchos aspectos, sumado a los problemas sociales de hoy, la droga, lo que se ve en la calle en general, hizo que la gente que estaba un poco alejada de la religión se empezara a replantear la educación de sus hijos.
Quien antes tenía prejuicios hacia la religión comenzó a encontrar en ella, por el contrario, un refugio y un lugar donde reencontrarse con su propia familia en un ámbito cuidado, de armonía y, sobre todo, un lugar seguro.
Por otro lado, por supuesto, tiene que ver la evolución con la calidad de estudio que se mejoró mucho en todo sentido: los docentes están más preparados, se les brindan capacitaciones en todas las áreas, se han incorporado la psicología, la psicopedagogía por ejemplo. Todo lo que en el mundo laico se usa, se introdujo en el mundo ortodoxo en la Argentina, y todo eso la gente lo vio y se volcó a un cambio.
– ¿Cuál es el rol que usted desempaña hoy en el área de la educación?
– Yo me involucro en lo educativo porque siento que es parte de lo fundamental en mi rol y sobre todo me gusta y me interesa.
Mi función es la supervisión general, la orientación estratégica de la tendencia y los contenidos de lo que se enseña, y trato a su vez de corregir las cosas antes de que se hagan más grandes, cuánto más grande es más difícil después.
– Sabemos que en la actualidad muchas familias se están volcando a elegir escuelas de línea ortodoxa; nuestra escuela particularmente tiene cada año una alta tasa de crecimiento, ¿con qué lo relaciona, ve algún factor que lo haya detonado?
– Lo comenté un poco antes, especialmente en Yeshurun estoy convencido que el cambio se basa en la calidad de la educación que se brinda y, por supuesto, en las posibilidades de las familias de acceder a ella.
Por supuesto se ve la gran voluntad y la capacidad y comprensión de la comisión directiva, de los equipos directivos y los docentes por seguir avanzando y mejorándose.
Esto influye muchísimo, gente que iba a otros colegios que no eran religiosos se han ido recuperando y han encontrado en Yeshurun un lugar que a ellos los conforma desde todo punto de vista: por un lado, obtener más religión, y por el otro, la alta calidad educativa.
– Por otra parte, vemos como las nuevas tecnologías aplicadas en la educación han ido creciendo hasta convertirse en una de las herramientas indispensables en el aula. ¿Cómo evalúa esta incorporación?
– Hay que ser realistas, sabemos que es esto lo que se está viviendo en el mundo y uno no puede quedar marginado. Si esto va a ser la panacea por decirlo así, no lo sé, pero obviamente el conocimiento que se logra hoy en día es mucho mayor.
Sí es importante recalcar que al haber tanta información hay que poner el hincapié en saber discernir con qué información me quedo y no perder el foco. Lo que debemos lograr es que la tecnología no nos confunda, ella debe estar a nuestro servicio y no dejar que sea al revés. Pienso que su uso es positivo y que es el mundo que uno está viviendo.
– Específicamente en Yeshurun Torá estos recursos están siendo aprovechados y maximizados en forma continua. Nosotros hace dos años presentamos el proyecto Y.Net, una computadora por alumno y en 2011 dimos inicio al programa Y.Tec, multiplicidad de recursos a disposición del docente y alumno para acompañar los avances que se han dado en las tecnologías. Uso de pizarras inteligentes y Ipads. ¿Qué análisis hace usted de la inserción de estos dos proyectos?
– El análisis es un poco lo que estábamos comentando acerca de la mejor calidad educativa que se le puede brindar a los alumnos. Hay un beneficio excluyente que es justamente la facilidad de acceso a todo, el tener a disposición en las casas todo el material de estudio a través justamente de la plataforma virtual, de las netbooks, etc…
Y además los padres están conformes, Yeshurun es una escuela que está a la vanguardia.
– Sabemos, por otra parte, que se está trabajando en la creación de un terciario. Aprovechamos la ocasión para que nos cuente un poco acerca de su próximo lanzamiento. ¿Cómo surge la idea? y ¿qué expectativas tiene?
– La verdad que desde siempre se viene deseando hacer una universidad, gracias a D´s tenemos todos los eslabones de la educación: el jardín, el primario, el nivel secundario, pero siempre faltó algo: la universidad.
Uno no escapa a las diversas situaciones por las que atraviesa el país y capaz los deseos se ven demorados. Por suerte, en este momento, a través de Toratenu y Yeshurun que se juntaron, elaboraron un proyecto sólido y con bases firmes y el año próximo se podrá concretar el paso anterior que será un Terciario.
Nos inclinamos por hacer un terciario justamente ya que consideramos que siempre es mejor ir de a poco, ajustando los detalles y sabemos sobre todo que hay una gran demanda de los padres y los alumnos hacia esto, existe una necesidad real.
Y bueno, el día de mañana ojalá que se pueda llegar a una universidad para que los chicos tengan cultura, una profesión y puedan trabajar.
Hacemos lo mejor que podemos y ojalá que cada alumno encuentre su destino.