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Fui al Ministerio de Asuntos Exteriores israelí en Jerusalén el 3 de septiembre de 2012 para presentar la siguiente carta, diseñada para exponer el régimen dictatorial de Eritrea. Cuando llegué al edificio, les expliqué a los guardias de seguridad que soy un solicitante de asilo eritreo que desea presentar una carta abierta al ministro de asuntos exteriores. Después de hacer una llamada telefónica para preguntar sobre mi caso, me dijeron que no podía entregar mi carta. Cuando traté de negociar, los guardias llamaron a la Policía, quienes me ordenaron abandonar el lugar.
Un informe de Naciones Unidas publicado en julio revela que el Consulado de Eritrea en Toronto utiliza la intimidación para obligar a los ciudadanos eritreos en Canadá a pagar un impuesto del dos por ciento, en violación de los acuerdos internacionales. Esta práctica es común en Israel.
Los solicitantes de asilo eritreos e indocumentados son instruidos a menudo por funcionarios de inmigración israelíes para ir a la Embajada de Eritrea en Tel Aviv y adquirir tarjetas de identificación (para lo cual deben pagar hasta $ 800) o pasaportes (que cuestan hasta $ 3.200). Además de estas tarifas exorbitantes, los solicitantes de asilo están obligados a pagar a las autoridades un impuesto a la ganancia del dos por ciento. Si no pueden pagar el impuesto, sus familias en Eritrea están obligadas a pagar una fuerte multa.
Carta escrita por Isayas Teklebrhan para ser entregada en el Ministerio de Asuntos Exteriores israelí.
Estimada Excelencia
Nosotros, los miembros de la Solidaridad Juvenil de Eritrea para el Cambio (EYSC) – un movimiento global para el cambio democrático en Eritrea – quisiéramos llamar su atención debido a la obtención ilegal de fondos por parte del Consulado de Eritrea en Tel Aviv.
El Gobierno de Eritrea está utilizando sus consulados para obligar a los expatriados a pagar impuestos que ayuden a financiar sus fuerzas armadas. El mes pasado, las Naciones Unidas dio a conocer un nuevo informe que confirma que los consulados de Eritrea están utilizando tácticas coercitivas para imponer un dos por ciento de impuesto a la ganancia en sus comunidades de la diáspora, con el objetivo ayudar a financiar a los militares en Eritrea, una práctica de recaudación de fondos que viola el embargo de armas impuesto por las Naciones Unidas en 2009.
En 2011, los gobiernos de Reino Unido y Alemania exigieron que Eritrea dejara de recaudar impuestos de la diáspora, con el argumento de que la práctica podría contravenir la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas y que el uso de métodos coercitivos podría ser una ofensa criminal. La presión para declarar ilegal el impuesto crece en otras partes del mundo: Canadá y los Países Bajos han convocado a los cónsules de Eritrea a dar explicaciones.
El Consulado de Eritrea en Tel Aviv juega un papel activo en la recaudación de ingresos para el régimen dictatorial de Eritrea usando la coerción, la intimidación, las amenazas y propaganda hacia los eritreos residentes en Israel.
Hacemos un llamado urgente a su oficina para:
-Exigir una explicación oficial del Consulado de Eritrea en Tel Aviv sobre las reclamaciones y hallazgos realizados en su contra por la ONU.
-Investigar inmediatamente los posibles delitos penales cometidos por el Consulado de Eritrea en suelo israelí, y para asegurar que el Consulado se adhiera al derecho internacional e israelí al ofrecer servicios consulares a los ciudadanos eritreos y los residentes israelíes de origen eritreo.
-Tomar una acción rápida contra el Consulado de Eritrea en caso de que la investigación concluyera que no se ha logrado cumplir con las leyes internacionales e israelíes y reglamentos.
EYSC y otros grupos jóvenes eritreos están formando actualmente un gobierno mundial y llevando a cabo una campaña en los medios de comunicación para exponer los dudosos métodos utilizados por el gobierno de Eritrea en recolectar ingresos en el extranjero. Damos la bienvenida a cualquier pregunta que pueda tener con respecto a los temas anteriores.
Gracias.
Atentamente,
Isayas Teklebrhan
EYSC Israel
Isayas Teklebrhan es un refugiado eritreo, quien vive en Israel desde el 2010. Es licenciado en física por la Universidad de Asmara en Eritrea. El abandonó Eritrea luego de haber pasado siete años en prisión por sus inclinaciones pro-democráticas. Esta carta fue escrita con la ayuda de un informe en el Toronto Star.