La comunidad judía de Villaguay, en la provincia de Entre Ríos, inauguró su templo con una importante presencia de autoridades comunitarias, locales, miembros de la comunidad y vecinos.
Se trata de la sinagoga de la Asociación Israelita Argentina de Villaguay, que desde ayer sábado funciona en la calle Balcarce 567, de esa ciudad entrerriana, y que desde hace más de 60 años brinda un espacio a las familias judías.
“Estar presente en la inauguración de una sinagoga es una apuesta al futuro y eso es lo que emociona porque en lugar de pensar en las dificultades que atraviesan piensan en un futuro mejor”, expresó, en declaraciones a la Agencia Judía de Noticias (AJN), Ana Weinstein, directora la Federación de Comunidades Judías de la Argentina (Vaad Hakehilot), quien participó en el acto en representación de la AMIA.
El presidente de la asociación, Silvio Teveles, transmitió la felicidad de la dirigencia comunitaria de haber podido inaugurar este nuevo templo, ya que lo calificó como “una alegría de vida, un sueño”.
“Nuestro templo funcionaba como salón multiuso, pero a partir de ahora tiene la fisonomía de templo. Hicimos un gran esfuerzo junto a la Asociación Israelita de las Pampas y los arquitectos que donaron su trabajo”, resaltó Teveles, quien también agradeció el acompañamiento de la gente de Villaguay.
Además de la presencia de la directora del Vaad Hakehilot también estuvieron presentes representantes de la Federación de Comunidades Judías de Entre Ríos, que también preside Teveles y que reúne al mayor número de congregaciones de la Argentina con 12 comunidades federadas.
Entre los invitados estuvo el presidente de la Asociación Israelita de Paraná Pablo Soskin, representantes de las comunidades judías de Villa Clara, Concepción del Uruguay. Colonia Avigdor e incluso miembros de la congregación de Neuquén.
Participaron también los intendentes de Villaguay y Villa Clara así como líderes de las distintas representaciones religiosas de la ciudad.
Los discursos estuvieron a cargo de Weinstein, Soskin y Teveles, mientras que el rabino Sebastián Wainstein ofició el Cabalat Shabat y la Avdalá con la inauguración.
Además, la ceremonia contó con la actuación de la orquesta kleztmer “Segundo Mundo” de Buenos Aires, que llegó a Entre Ríos con una formación ampliada.
“Tuvimos una actuación de los chicos del Ken (constitutivo de la educación judía no formal brindada por los mismos chicos que se formaron y capacitaron allí) que interpretaron una canción en hebreo y distribuyeron la letra a los presentes”, comentó Teveles.
Lo cierto es que el nuevo templo de la Asociación Israelita Argentina de Villaguay, un edificio construido a raíz de la necesidad espiritual de un grupo de vecinos que deseaban compartir actividades afines a la vida judaica, también funcionará como centro cultural y para actividades sociales y religiosas.
“Para nosotros es todo un orgullo. Nos dimos un gran gusto y nos da un poco más de fuerza sobre todo en momentos que muchas sinagogas y shules (escuelas judías) cierran nosotros apostamos por más”, manifestó Teveles.
El dirigente señaló que la comunidad está integrada por unas 50 familias que padecen los mimos problemas que el resto de las congregaciones del interior de la Argentina y es que los chicos emigran a Buenos Aires o viajan a Israel para hacer su vida.
Justamente, los jóvenes de la comunidad suelen hacer el viaje a Israel a fin de curso y en muchos casos ya no regresan a Villaguay.
La comunidad también cuenta con shule de dos veces a la semana que funciona de manera informal pero que brinda a los chicos educación judía.
“Trabajamos con la Asociación Israelita de las Pampas y nuestra tendencia es conservadora, condición que es respetada por la asociación”, según explicó Teveles.
Una vez al mes la comunidad recibe la asistencia de un rabino o un seminarista, que se hace presente para las festividades de Iom Kipur, Rosh Hashana, Pesaj y para las ceremonias de Benei Mitzvá.
Los miembros de la comunidad suelen reunirse para algunas de las festividades y es tradicional cortar el ayuno de Iom Kipur todos juntos, de acuerdo a lo relatado por el presidente comunitario.
“Otras de las actividades que hacemos hacia afuera es la donación de ropa para comedores, asilos y también nuestros chicos del Ken hacen alguna actividad barrial”, comentó.
Teveles desestimó que la nueva sinagoga vaya a atraer a los judíos de las comunidades vecinas ya que tanto Domínguez como Santa Clara pueden mantener su propio servicio, ya que son ciudades que tienen mucha historia, con sus templos importantes.
El dirigente comentó que la comunidad necesita ahora “un nuevo Sefer, porque el que hay es bastante viejo, tienen sus años y necesitaría una renovación”.
Realidad comunitaria
Teveles, como responsable de la Federación de Comunidades Judías de Entre Ríos, también analizó la realidad comunitaria en la provincia y destacó la firma de un convenio con la gobernación para incluir en forma obligatoria la enseñanza de la Shoá (Holocausto) en la currícula educativa.
El tema es tratado en cada aniversario de La Noche de los Cristales Rotos y los docentes reciben una guía práctica para que puedan investigar sobre la Shoá y enseñar a los chicos.
Asimismo, Teveles confirmó que la federación trabaja en la recuperación de algunos edificios institucionales, pero aclaró que esta no es una tarea fácil.
También resaltó el éxito que tiene el circuito de las colonias judías que va desde Basavilbaso en el sur de la provincia, hasta Villa Clara en el norte, y cerrándose en la memoria judaica de Villaguay.
Además, Entre Ríos mantiene su nexo con la AMIA a través del lugar que ocupa en la mesa del Vaad Hakehilot y que le sirve para compartir varios proyectos.
La AMIA presente en Villaguay
Justamente, Ana Weinstein también destacó la presencia de Villaguay como una de las 54 comunidades adheridas a la Federación de Comunidades Judías de la Argentina.
Weinstein explicó que la comunidad de Villaguay, ubicada en el centro de la provincia, se conformó con descendientes de los colonos judíos que llegaron a las ciudades vecinas y que fueron parte de lo que se conoce como los gauchos judíos.
“Hay una gran responsabilidad en el mantenimiento de la vida judía y desde AMIA apoyamos con todo lo que podemos, educación, actividades para jóvenes y adultos mayores. Ahora acompañamos en un momento tan feliz porque tiene una sede remozada con mucha luz, porque el signo de seguir sosteniendo una luz brinda alegría”, transmitió la directora en diálogo con AJN.
Además, Weinstein destacó que Entre Ríos tiene “una gran ventaja y es que están organizadas las distintas comunidades, desde la más grande que está en Paraná y que tiene lazos organizativos para la continuidad de una vida que se arraigó con los gauchos judíos”.
No obstante, la directora admitió que existe el problema de que los jóvenes de las zonas rurales suelen “buscar nuevos horizontes”, pero destacó el compromiso de continuar en la formación de los chicos.