El primer ministro israelí Ariel Sharon despidió a dos ministros de extrema derecha el viernes y se aseguró una mayoría en el gabinete para su plan de retirada de Gaza, aunque se arriesga a una crisis política que podría provocar la caída del gobierno.
Sharon despidió a Benny Elon y a Avigdor Lieberman, de Unión Nacional, un partido a favor de los asentamientos judíos en los territorios ocupados. Ambos eran firmes opositores dentro del gabinete al plan de retirada del primer ministro, una iniciativa respaldada por Estados Unidos.
Fuentes políticas dijeron que la medida evitará que Sharon tenga que modificar el plan o enfrentarse a una derrota en la votación del domingo para la aprobación de su iniciativa.
Sharon tomó la decisión después de no poder llegar a un arreglo con el ministro de Finanzas Benjamin Netanyahu y otros miembros rebeldes de su partido derechista Likud, que se oponen a la entrega de los territorios capturados por Israel en la guerra de Oriente Medio de 1967.
Una encuesta del periódico Haaretz reforzó la postura de que la mayoría de los israelíes -el 59 por ciento- apoyan el retiro de los asentamientos de Gaza, difíciles de defender, donde viven 7.000 judíos cerca de 1,3 millones de palestinos.
Pero el Likud rechazó el plan de Sharon en un referéndum el 2 de mayo, al considerarlo un retroceso ante el «terrorismo palestino».
Una fuente cercana a Sharon dijo que todavía había una posibilidad de última hora para solucionar las diferencias, antes de la votación del domingo. Los despidos entrarían oficialmente en vigencia dentro de 48 horas.
«No ignoré los intentos de llegar a un arreglo pero hubo algunas cosas a las que no podía ceder y no lo hice», dijo Sharon, un ex general a quien le gustan las políticas arriesgadas. «Necesito llegar a la mayoría el domingo», dijo al periódico Haaretz.
Sharon primero convocó a sus ministros a su oficina, pero cuando estos se negaron, envió mensajeros para entregarles cartas de despido, cada una de tan solo una línea de texto, sin fundamentar la decisión.
El ministro de Turismo Elon, que acusó a Sharon de intentar «crear una mayoría artificial», optó por no presentarse. En un extraña postura dijo, en declaraciones a Radio Israel, que quería evitar recibir la notificación oficial así podría tener posibilidad de votar el domingo.
Lieberman, el ministro de Transporte, recibió la carta de despido mientras hacía ejercicios en un gimnasio de Jerusalén, dijo la emisora Radio Ejército.
Los colaboradores de los ministros desplazados dijeron que los despidos eran «antidemocráticos».
Antes de prescindir de los ministros, Sharon tenía a 11 miembros de su gabinete a favor de su plan y a 12 en contra. Los despidos le garantizan la victoria por un voto.