El ministro de Relaciones Exteriores israelí, Avigdor Lieberman (foto), mantuvo hoy, miércoles, una sorpresiva reunión con el primer ministro ruso, Vladimir Putin, en Moscú sobre la reciente entrega a Siria de misiles tierra-agua Yaknot vendidos en 2007, en abierto desafío a la propuesta occidental de un embargo de armas a Damasco por su represión a opositores.
Jerusalem ya ha expresado su preocupación de que esos 72 proyectiles, valuados en 300 millones de dólares, caigan en manos de la organización terrorista libanesa Hezbollah.
Ayer, martes, Lieberman se reunió con su par ruso, Sergei Lavrov, en el marco de una reunión de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, en Lituania, de la cual también participaron sus colegas de Canadá, Suecia, Letonia, Azerbaiyán, Holanda, Finlandia y Letonia.
El israelí tenía programado viajar a Moscú recién mañana, jueves, para una reunión económica ruso-israelí, durante la cual se reuniría con el viceprimer ministro, Viktor Zubkov, pero nada se dijo acerca del ex presidente ruso.
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