Dina Siegel Vann, directora del Instituto de Asuntos Latinos y Latinoamericanos del Comité Judío Americano (CJA) lamentó la negativa de Israel a participar en la Conferencia Mundial contra el Racismo, que tendrá lugar en los primeros meses de 2009 en Ginebra, y denunció que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU –que organiza el Foro- “está siendo utilizado por una mayoría automática”.
“Las Naciones Unidas son utilizadas por una mayoría automática integrada por la Conferencia Islámica (que agrupa a 57 países árabes) y los Países No Alineados, motivo por el cual no hay un debate claro y justo sino que la agenda es secuestrada por grupos con intereses muy marginales y se enfoca en la deslegitimación del Estado de Israel”, expresó Siegel Vann en diálogo con la Agencia Judía de Noticias (AJN) desde Washington.
La dirigente afirmó que es una “pena” que países como Canadá e Israel -y probablemente Estados Unidos e incluso Francia- se vean en la “necesidad” de no participar en Durban II pero recalcó que el Estado hebreo “fue muy claro al decir que si se cruzaban ciertas líneas rojas, que efectivamente se han cruzado” no acudiría al Foro.
En ese sentido, recordó que el documento de la reunión preparatoria de Asia, que tuvo lugar hace algunos meses y que está siendo considerado como base para la discusión durante la conferencia, fue “tremendamente hostil hacia Israel”.
Siegel Vann manifestó que “el problema del racismo sigue aquejando a muchos países del mundo muchos de los cuales no reconocen a Israel.
Según el diario israelí Haaretz, la decisión israelí de no participar en la Conferencia se dio porque la Canciller, Tzipi Livni intentó asegurarse que Durban II no se transformara en un foro antisemita, pero ante una respuesta ambigua del Secretario General, Ban Ki Moon, decidió no acudir.
En ese sentido, Siegel Vann afirmó que “sería importante que Ban Ki Moon, con la autoridad moral que tiene, ponga las cosas en claro pero lamentablemente no hemos visto que eso suceda”.
Canadá ya había afirmado que no participara del Foro y a dicha negativa ahora se sumó Israel. Por su parte, Estados Unidos y Francia estarían aún evaluando qué acción implementar.
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