«Pretendíamos conseguir a través de nuestras negociaciones un documento conjunto, pero desafortunadamente no logramos ponernos de acuerdo sobre su formulación, ya que cada parte tiene su propio punto de vista», dijo el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abas, en su discurso ante los ministros de Exteriores árabes reunidos en El Cairo.
Antes, los países reunidos en la capital egipcia difundieron una declaración final en la que anunciaban haber «aceptado la invitación a participar en la conferencia de Annapolis a nivel ministerial», el 27 de noviembre en esa localidad próxima a Washington.
El texto no menciona explícitamente a Siria, cuyo ministro de Exteriores, Walid Muallen, declaró poco antes que Damasco sólo participaría en la reunión de Annapolis si Washington incluía en el orden del día el tema de la soberanía de la meseta del Golán, anexionada por Israel.
«Todos los participantes podrán hacer valer su punto de vista y presentar cuestiones de interés nacional como les parezca», respondió el portavoz del departamento de Estado Karl Duckworth, interrogado sobre si el tema del Golán estaría en el programa.
Además, Duckworth valoró la decisión de la Liga Árabe como «una señal de que creen que será un encuentro muy serio y productivo», dijo a AFP.
Siria exige la restitución total del Golán, ocupado por Israel en 1967 y luego anexionado en 1981. Las negociaciones de paz sirio-israelíes están congeladas desde el año 2000.
La portavoz del primer ministro israelí, Ehud Olmert, Mirin Eisin, se felicitó por «esta gran participación» que demuestra «el apoyo de los países de Oriente Medio al proceso de paz palestino-israelí».
Por el contrario, el movimiento palestino Hamas, que dijo que organizará el lunes una conferencia de rechazo a Annapolis en Gaza, exhortó a los países árabes participantes a no normalizar sus relaciones con Israel y a no hacer «concesiones».
Antes de la reunión de El Cairo, Egipto y Jordania, los únicos países que han firmado tratados de paz con Israel, habían anunciado su presencia en Annapolis. Asimismo, el sultanato de Omán se convirtió en la primera monarquía del Golfo en confirmar su participación.
Doce países miembros del comité encargado de promover la iniciativa de paz árabe de inspiración saudí lanzada en marzo en Riad y la Autoridad Palestina participaban en la reunión del viernes.
La iniciativa saudí prevé una normalización de las relaciones entre los países árabes e Israel, a cambio de la retirada del Estado hebreo de los territorios árabes ocupados desde junio de 1967, la creación de un Estado palestino con Jerusalén este como capital, y un acuerdo «equitativo y aceptable» sobre la cuestión de los refugiados palestinos.